El sistema geotérmico reduce el gasto de la piscina cubierta a 40.000 euros

En el municipio de Benejúzar festejan que el sistema energético de geotermia instalado bajo la piscina cubierta haya dado sus frutos. Con una incesante subida de la tarifa de la luz y los carburantes a un precio prohibitivo para las calderas se decidió cambiar la fuente de alimentación del centro deportivo, que ha fijado un gasto en consumo de 40.000 euros, con lo que se convierte en una piscina más competitiva que otras de su entorno.

El aprovechamiento del calor del subsuelo incide en que la factura de luz no se dispare. La piscina climatizada es más sostenible gracias a que el Consistorio desembolsó una importante inversión de en torno a los 130.000 euros para conseguirlo, menos que las pérdidas que gravan el erario de ayuntamientos de la comarca con instalaciones similares como el de Callosa de Segura o que lo hacían hasta su cierre en Bigastro o Redován.

Con este presupuesto se creó una red de conducciones a más de 150 metros de profundidad. El agua que atraviesa el circuito se calienta de forma gratuita y reduce costes. El novedoso sistema permite calentar los cientos de metros cúbicos del vaso de la piscina climatizada con una energía renovable.

Tras cumplir un año abierta durante el que se han ofrecido diferentes actividades acuáticas y de otra índole el gasto fijo es de 40.000 euros, muy por debajo de las pérdidas de otros centros. Por ejemplo, en Callosa de Segura se han contabilizado unas pérdidas de 150.000 euros a pesar de la gestión municipal. Este tipo de instalaciones deportivas generan un gran coste energético. Solo en Redován se empleaban más de 3.000 euros para mantener el agua a la temperatura ideal para la práctica de deportes acuáticos en invierno.

El primer edil, Antonio Bernabé, indica que «hemos tratado de hacer una piscina comarcal, y viene mucha gente de otras poblaciones». Las matriculaciones acogen a personas de Algorfa, Almoradí y Bigastro que ven atractivas estas clases. En este sentido, incluso se realizan eventos relacionados con bienestar social.

El proyecto arrancó de los últimos dentro del Plan Confianza pero a pesar de esperar una legislatura se pudo adjudicar y abrir al público una de las pocas instalaciones viables de este tipo que no se encuentren en una ciudad con mayor población.

La denominada Piscina Vega Baja ha tratado de diversificar su oferta con clases de natación, aquafitness y otras actividades paralelas más propias de gimnasios como yoga, GAP y otras clases que completan la oferta con el fin de atraer al máximo número de público. Desde el gobierno local se apostó por realizar una concesión a una empresa privada para que administrase el centro.

A la piscina solo le queda por completar una segunda fase ya que desde el Consistorio se solicitó una subvención del Plan de Obras y Servicios de la Diputación de Alicante para trasladar a una parcela anexa la biblioteca municipal. Este proyecto lo adjudica de forma directa la institución provincial, por ello, el primer edil buscó desatascar el proyecto con el presidente César Sánchez. Este mismo organismo también tiene que acometer un pabellón cubierto para que los escolares del municipio puedan practicar educación física durante las jornadas invernales.