La ampliación del tercer carril de la A-7 mejorará los accesos a la autovía
La construcción de varias intersecciones con rotondas mejorarán la seguridad vial en la N-340 y en las salidas de Catral y San Isidro
Fernando Amat
Lunes, 16 de noviembre 2015, 00:37
La anunciada ampliación de la Autovía A-7 supondrá una mejora de los accesos en los puntos que conecta con los municipios de la Vega Baja, algunos con alta siniestralidad. El Ministerio de Fomento quiere facilitar a los viajeros que tengan la posibilidad de acceder a ambas direcciones en todas las salidas, ya sea dirección Alicante o Murcia, por lo que se ha planteado la construcción de cuatro rotondas que aliviarán el tráfico en diferentes puntos negros.
Una de las intersecciones más transitadas es la salida Orihuela-Redován, donde se pretende aligerar el flujo de transportes pesados. Este punto concreto se ubica en el término municipal de Cox, en el acceso al polígono industrial San Fernando, donde acuden a diario cientos de camiones y furgonetas para cargar en los diferentes almacenes hortofrutícolas. Este punto junto a la salida hacia la Virgen del Camino es uno de los tramos de mayor siniestralidad de la Nacional 340, que pasa por debajo de la Autovía del Mediterráneo.
El planteamiento comprende la creación de dos rotondas distanciadas por 250 metros que corregirán las numerosas colisiones y multas. El acceso a la carretea nacional obliga a los conductores a realizar cambios de sentido en las entradas a las fábricas colindantes, por lo que muchos conductores infringen la señalización vial.
El ambicioso proyecto que tiene un presupuesto de 69 millones de euros también engloba la creación de otras dos rotondas más en la zona este de la vía. El municipio de San Isidro dispondrá de una rotonda similar a la que existe en Albatera, mientras que en la salida hacia Catral también se ha previsto otro cruce circular. Al margen queda la salida de Orihuela y Benferri donde la Conselleria de Infraestructuras «ya dejó unos acceso con forma de diamante con pesas», según revela el estudio previo que se ha realizado Fomento y que se expone al público para realizar alegaciones durante las próximas semanas. Otra transformación que está prevista afecta a los pasos elevados que se van a ensanchar por el centro, algo que los técnicos llaman 'luz central'. Los puentes se van a adaptar a la actual normativa que exige un galibo de más de cinco metros de altura. Para ello, se prevé «ampliar la luz central porque es la solución más competitiva económicamente hablando».
La justificación de los 17 kilómetros de ampliación del llamado Corredor Mediterráneo se encuentra en el alto volumen de tráfico que soporta esta carretera con una media de 25.000 vehículos al día y por la concentración de tráfico en las carreteras adyacentes. Para ello, se ha abierto el periodo de exposición pública después de varios años en el ostracismo.
La primera propuesta de continuar el tercer carril que empieza en Elche se realizó en el 2008, y tras varias prórrogas del proyecto se prevé que se encuentra en funcionamiento dentro de dos años. Para ello, se va hacer necesario además de las nuevas infraestructuras de carreteras la modificación de tendidos eléctricos de media, baja y alta tensión. Los servicios de evacuación de pluviales y acequias que pasan por debajo de la autovía también significa un aspecto obligatorio del proyecto.