Los autores del atentado en el Crocus City Hall de Moscú admiten su culpabilidad
Los acusados han mostrado arrepentimiento por causar la muerte de 149 personas al ser llevados al tribunal militar donde se ha celebrado la primera audiencia
Los principales acusados del atentado del Crocus City Hall han admitido este lunes su culpabilidad en la primera audiencia del juicio, celebrada a puerta cerrada ... en el Tribunal Militar del Segundo Distrito Occidental, a las afueras de Moscú. Los acusados también han demostrado arrepentimiento por cobrarse la vida de 149 personas y causar cerca de 600 heridos en el peor ataque en Rusia en años. Una masacre equiparable a otras matanzas como la de la Escuela de Beslán en 2004, también perpetrada por terroristas islámicos.
Liudmila Áivar, abogada y representante legal de 127 de los afectados por el acto terrorista en la ciudad rusa de Krasnogorsk (región de Moscú) lo ha explicado a agencias como TASS. «Tras la lectura del acta de acusación, todos los participantes directos en el atentado declararon que admiten plenamente su culpabilidad y se arrepienten de sus actos», ha relatado.
Al menos 30 de los supervivientes del ataque asistieron al juicio, que se prevé que celebre nuevas audiencias el próximo martes y jueves. La Fiscalía baraja dos opciones: que el ataque lo planificó el Estado Islámico (organización reconocida como extremista y prohibida en Rusia) o que fue organizado por Ucrania con el apoyo de servicios de Inteligencia extranjeros.
Los asaltantes admitieron a finales de julio haber tomado drogas para acallar el miedo antes del ataque. Uno de ellos, el único que no las tomó y no tenía rastro de estupefacientes en la sangre, mostró previamente arrepentimiento y admitió su culpabilidad. Además de los cuatro principales acusados, Dalerjon Mirzoyev, Saidakrami Murodali Rachabalizoda, Shamsidin Fariduni y Muhammadosboir Faizov, todos de nacionalidad tayika, otros 15 hombres están siendo juzgados por sus posibles vínculos con los terroristas. Concretamente fue Estado Islámico del Gran Jorasán quién reivindicó la autoría del atentado a través de su propia agencia de noticias.
En los días posteriores al ataque se supo que almenos 70 de los 149 fallecidos lo hicieron a causa del incendio o del humo proveniente del mismo. Los terroristas usaron explosivos en las plantas superiores de la sala de conciertos Crocus City Hall, lo que desató un potente fuego que los bomberos tuvieron dificultades para apagar.
El auditorio es parte de un recinto de 90 hectáreas dedicadas al entretenimiento y sigue a día de hoy en proceso de reconstrucción debido a los daños que causó el atentado a la estructura. El pasado 22 de marzo se inauguró un obelisco en memoria de las víctimas, al que los allegados acuden periódicamente para dejar fotos, flores y muñecos de peluche.
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