«Les recriminamos por tirar 'borrachos' y me dieron con un palo en la cabeza»

Los presuntos agresores, al parecer menores de edad, no admitieron el hecho de que los falleros les pidieran que se alejaran de su zona si querían lanzar petardos, porque había niños cerca, y empezaron a agredir físicamente a los falleros.

La pandilla de agresores estaba compuesta por más de 20 jóvenes y los falleros tuvieron que resguardar a los niños de la comisión porque estaban atemorizados. Los falleros y también vecinos llamaron a la Policía Nacional, que se presentó en la zona, pero los menores agresores salieron corriendo. Una vez se fueron los agentes, la pandilla volvió, nos amenazaron, «nos decían que esto no se iba a quedar así», según un fallero.

Es más, se pusieron a agredir a hombres y mujeres, todos ellos falleros. Los falleros trataron de defenderse mientras pedían de nuevo la presencia policial, pero algunos acabaron hospitalizados.

A un mujer «que trataba de calmar los ánimos la empujaron tiraron al suelo y acabó con dolores en la muñeca, espalda y rodillas. Pegaron a varios falleros e incluso a uno le abrieron una brecha en la cabeza», detalla una fallera testigo de los hechos.

Fueron varios los falleros que acabaron en el Hospital General para ser atendidos por los golpes. Una de las víctimas, que prefiere preservar su identidad, detalla: «Queríamos una cremà tranquila y un grupo de menores nos agredieron. Me golpearon en la cabeza con un palo y me han hecho una brecha y chichones. No he podido ir a trabajar porque los médicos me pidieron quedarme en casa en observación». Cuando advirtieron a los menores que iban a llamar a la Policía «nos decían, da igual, llamarla. No temen a nada. Nunca hemos visto tanta agresividad». Los menores son de otros barrios, pero visitantes habituales. «Al volver, no llevaban camisetas, no sabemos si era para no identificarlos o para que no se les rompiera. Vinieron con piedras y palos extensibles».

Los falleros afirman que la Policía tuvo que regresar en varias ocasiones y que les aconsejaron que quemaran pronto la falla grande y se fueran. Eso sí, estuvieron vigilando hasta que se cerró el casal. En la comisión lamentan la situación y se llevaron las cosas de valor del casal, como el estandarte, banderines, la Senyera y las botellas de bebida. Una vez en el hospital se encontraron con uno de los menores de la pandilla y la madre, según los falleros, «nos amenazó». Uno de los falleros agredidos añade que «después de pasar horas en el hospital, tuvimos que ir a la comisaría de Abastos a denunciar los hechos y no he llegado a casa hasta las 6».

Fuentes de la Policía Nacional afirman que se está investigando el tema porque ha habido lesiones, pero añaden que de momento no hay detenidos porque cuando iban los agentes, los malhechores huían.

Desde la asociación de vecinos aseguran que están cansados de advertir de estos actos vandálicos. «Hay veces que en las canchas deportivas se juntan hasta 300 personas, a pesar del Covid. Se ponen a beber y hay venta de bebida y de droga. Cuando ya van bebidos, se ponen a increpar a la gente, a romper coches, hacer daño en patios y defecan en la calle y hemos oído que posiblemente ha habido agresiones sexuales en esta zona de canchas», comentan los vecinos.

Los vecinos, hartos de la situación, añaden que «si las fuerzas de seguridad no ponen medios para solucionarlo, al final los vecinos saltarán». Aseguran que en el caso de estos menores, «son pandillas de otros barrios. Unos de Patraix y otros de la zona de la avenida del Cid».