Los casales falleros recuperan las cenas de sobaquillo

Los falleros ya no sólo podrán reunirse para tareas administrativas, adquirir lotería o hacer ensayos en pequeños grupos, además, podrán organizar actos con público o juntas con posterior cena, eso sí con las correspondientes distancias sociales.

Si hasta ahora sólo se permitía usos de gestión y ensayos y en horario de 10 a 13 horas y de 16 a 23 horas y no se podía quedar para comer ni beber, ahora la limitación de una hora antes de la media noche desaparece y, además, ya se pueden reunir alrededor de una mesa.

Los falleros lo que pedían era equiparse al horario de la hostelería y, aunque venían reclamando desde marzo una apertura escalonada, reivindicación que recordaron a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, en la última reunión de mayo, ha sido ahora cuando se han escuchado.

Si hacen comidas o cenas en el interior de los casales, tendrán que respetar lo mismo que se marca para la hostelería, es decir, el 50% de aforo; en estos momentos mesas con grupos de 10 personas y distancia de metro y medio entre mesas. Además, no se podrá estar en las barras. En el caso de organizar actos sociales, el aforo será del 75%.

Salvo en el momento concreto de la comida, durante el resto del tiempo se tendrá que llevar la mascarilla puesta y apostar siempre por una correcta ventilación de los locales.

A la pregunta de que supone este avance para los falleros, el presidente de la Interagrupación de Fallas de Valencia, Guillermo Serrano, explica que «se nos ha equiparado por fin al resto de ciudadanos. Se ha hecho justicia porque no se entendía que los falleros pudiéramos cenar en un bar o en una casa, pero no en el casal». Y añade que «aplicando las normas correspondientes, llevamos tiempo diciendo que teníamos derecho a hacerlo».

Según Serrano, «la decisión del 4 de julio no fue justa con el mundo fallero, cuando el resto de actividades económicas y sociales estaban en marcha». Y argumenta que con esta desescalada que entra hoy en vigor «se ha rectificado y los falleros van a seguir trabajando para preparar las Fallas de septiembre».

Y es que cabe recordar que los casales se cerraron a final de octubre, pocos días antes de Halloween, y a principios de año se prometió una desescalada que sólo tuvo una primera fase a finales de marzo o abril y que sólo permitía reuniones primero de cuatro personas y luego de seis y lo último fue un aforo del 75%.

Desde la Federación de Especial, el presidente, Rafa Mengó, detalla que «por supuesto hacemos un llamamiento a que se mantenga la prudencia porque si hubiera desmadres estaríamos en el punto de mira». Añade que «quedan dos meses para las Fallas y vamos a seguir siendo prudentes, como siempre, para poder celebrarlas».

Francisco Romero, presidente de la Federación de Fallas de Primera A, opina que «era importante poder retomar muchas actividades falleras, pero siempre seremos prudentes porque el 'bicho', el virus, está ahí, no se ha ido». Recuerda que «además las fallas tenemos coordinadores Covid que prepararán los actos, figura que no tienen otros colectivos. Seremos prudentes para llegar a las Fallas de septiembre».

Si bien algunos casales confirman que van a seguir con 'perfil bajo' y que se dedicarán a preparar las Fallas de septiembre pero no a hacer ahora eventos, porque vienen las vacaciones, otras como Escalante-Amparo Guillén preparan para este sábado la inauguración de su casal. «Ahora estamos limpiando y preparando la sede porque hemos reformado un bajo y nos hemos mudado a un nuevo casal. Lo queríamos inaugurar en octubre, pero no pudo ser porque ordenador el cierre de casales. La idea es hacer el corte de cinta y un aperitivo. Estará todo muy controlado», indica Sento García.

En La Merced, por ejemplo, presentan este jueves el logo de su 150 aniversario, eso sí, será acto protocolario sin servir comida.