Más de la mitad de las empresas de la Comunitat Valenciana no tienen página web
Fundación LAB presenta junto al IVIE el mayor análisis hasta ahora sobre digitalización empresarial: el tamaño y el sector marcan la brecha y las compañías digitalizadas son más rentables
El salón del Hub Empresa de Banco Sabadell, en la calle del Justícia de Valencia, estaba lleno antes de que comenzara la presentación. El ambiente era propio de los actos de Fundación LAB Mediterráneo, que reunió a su patronato, a investigadores del Ivie y a directivos empresariales para desgranar un informe que revela un dato tan sencillo como contundente: la Comunitat Valenciana no está aún en la economía digital. Al menos, no del todo.
El nuevo estudio, elaborado por el Ivie y enmarcado en el Observatorio LAB de I+D+i, tecnología y emprendimiento, confirma que sólo el 44,5% de las empresas valencianas tienen página web en activo. O lo que es lo mismo: más de la mitad del tejido productivo no tiene presencia digital básica, una condición mínima para operar, ser visible, comercializar o relacionarse con clientes y proveedores en el entorno actual.
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Observar para actuar
El hallazgo, como explicó el investigador y profesor universitario Juan Fernández de Guevara, no es menor. «Si una empresa ni siquiera ha dado el primer paso —tener web—, es difícil que esté en fases más avanzadas de digitalización», apuntó.
El estudio, que por primera vez permite cuantificar este fenómeno a gran escala, ha requerido una metodología inédita: un cruce masivo de datos de SABI, revisión de webs existentes (solo el 35% estaban identificadas en base original) y una segunda depuración con inteligencia artificial y verificación manual para comprobar si estaban activas y correspondían realmente a las empresas.
El tamaño, la edad y el sector sí importan
La digitalización valenciana no avanza a la misma velocidad en todas las compañías. El informe detecta un patrón clarísimo: el 90,5% de las grandes empresas tienen web activa; de las medianas, un 82,6%; de las pequeñas, un 65,6%; y de las microempresas, sólo el 37,8%, lo que las sitúa como el principal cuello de botella. Son pequeñas, con menos de seis trabajadores, y según Fernández de Guevara, «enfrentan más dificultades para incorporar herramientas digitales, desde costes hasta falta de tiempo, conocimiento o estrategia».
Por edad empresarial también se observan diferencias: las empresas de más de 10 años presentan una tasa de presencia digital del 46%, mientras las jóvenes (menos de 5 años) se quedan en torno al 40%, una cifra que sorprende a los investigadores, que esperaban mayor adopción en negocios recientes.
Y aunque el informe incluye un análisis exhaustivo por sectores, el patrón general es claro. En manufacturas, un 62,1% de empresas tienen web; en servicios, un 43,8%; en energía, un 29,2%; en construcción, un 37,2%; y en el sector primario, tan sólo un 21,9%. En este reparto, sectores como información y comunicación, agua-residuos, educación y sanidad se sitúan en niveles altos de presencia digital.
Digitalizarse mejora la empresa… y mucho
Si bien, el informe no se limita a contar webs. Compara empresas digitalizadas y no digitalizadas en su desempeño económico y financiero. Y la diferencia es significativa: en cuanto a rentabilidad, las empresas con web aventajan en 1,8 puntos a las que no; y en cuanto a deuda a largo plazo, 13,6% en digitalizadas vs 16,9% en no digitalizadas.
Por otro lado, en cuanto a liquidez (tesorería sobre activos), 11,9% las digitalizadas vs 8,4% las no digitalizadas; y en cuanto a riesgo de fragilidad financiera: el 9,4% vs 13,7%. Además, el 13,6% de las empresas con web vende al exterior, por el 4,1% de las que no tiene.
Los economistas matizan que estas diferencias se observan sobre todo en pymes, ya que en las grandes empresas tener o no tener web «apenas marca diferencias» por la propia estructura avanzada de estas compañías.
¿Y las redes sociales? Un uso más amplio, pero parcial
El estudio se centra en la página web como indicador clave de digitalización —y de vocación digital—, aunque el propio equipo reconoce que existe un porcentaje relevante de empresas que usan redes sociales como único escaparate.
Según los datos presentados, el 60% de las empresas valencianas que tiene página web tiene presencia en redes, de las cuales Facebook es la más utilizada (75%), seguida de Instagram. Aun así, los autores advierten que las redes no sustituyen la web en cuestiones como trazabilidad, profesionalización, venta, posicionamiento o incluso reputación. De ahí la decisión de fijar la web como primer filtro.
Fundación LAB: «2026 será un año de aceleración»
Antes de presentar los datos, la directora de Fundación LAB Mediterráneo, Marta Chillarón, recordó la misión del proyecto impulsado por AVE: posicionar a la Comunitat como referente en innovación, emprendimiento, tecnología e I+D+i. Además, anunció tres líneas estratégicas para 2026:
1. International Council: un consejo global con referentes de ecosistemas internacionales.
2. Primer gran evento internacional de Fundación LAB (30 marzo–27 abril), con líderes ya confirmados de varios sectores de innovación.
3. Comunidad LAB: una plataforma de conexión libre entre empresas, pymes, startups e inversores.
En definitiva, una primera fotografía deja una conclusión nítida: la digitalización valenciana avanza, pero no lo hace al ritmo que exige la economía actual. Y, sobre todo, deja un mensaje directo a empresarios y pymes: «Las empresas que no tienen presencia digital deberían hacerlo. No es solo una cuestión de visibilidad, sino de competitividad», subrayó Fernández de Guevara. Mientras tanto, el tejido empresarial valenciano —en plena efervescencia innovadora— encara un desafío tan básico como decisivo: estar o no estar en internet.