La Comunitat instalará 1.800 megavatios de fotovoltaica en los próximos tres años

Esta cifra corresponde al volumen de potencia que autorizó la Generalitat Valenciana en 2024, que se irá instalando en este periodo de tres años «si todo va bien» y se superan los hitos pendientes de la tramitación. Para ser conscientes del volumen autorizado, sólo hay que compararlo con los megavatios conectado a la red en 2024: 32 megavatios. Es decir, hasta 2027 se podrán conectar 56 veces más de lo logrado en 2024.

A nivel nacional las energías limpias ya suponen el 66% de la potencia instalada, mientras que en la Comunitat ese porcentaje apenas alcanza el 35,6%. Esto se explica por el ritmo de instalaciones, una asignatura pendiente en la Comunitat a la que se está atajando mediante una normativa que ha simplificado la tramitación. «Sí observamos que está agilizando las tramitaciones, pero falta ver el ritmo al que los ayuntamientos conceden las licencias», explica Pedro Fresco, director de Avaesen.

Según datos del informe, durante 2024 se han instalado en España 7.300 MW de renovables mientras que en la Comunitat Valenciana solo se han instalado 32 MW fotovoltaicos, sin ningún nuevo megavatio eólico o de otras tecnologías renovables; es decir, que la Comunitat Valenciana aporta un 0,44 % a la potencia renovable instalada nacional. Es más, esos 7.300 MW de incremento nacional suponen un aumento del 8,6% de nueva potencia renovable instalada frente a los 32 MW que solo representan un 1,31% de nueva potencia renovable instalada en la Comunitat. En términos globales, la Comunitat Valenciana solo aporta un 3% de la producción renovable nacional.

258 años para alcanzar los objetivos

Según el documento, de seguir este ritmo de crecimiento, la Comunitat necesitaría 258 años para alcanzar los objetivos establecidos en el Decreto-Ley 14/2020: 6.000 MW solares y 4.000 MW eólicos antes del año 2030. Hasta la fecha, solo se ha cumplido un 8% del objetivo fotovoltaico y un 31 % del eólico. A pesar de estos datos, desde AVAESEN se valoran «positivamente» los esfuerzos en la agilización de los trámites y la buena voluntad del gobierno autonómico, como demuestra la aprobación del último

Decreto Ley. Con este se ha producido un avance significativo en el ritmo de autorizaciones de nuevas instalaciones renovables. Sin embargo, es pronto para traducir ese impulso en el número de proyectos conectados, ya que estos requieren plazos de ejecución que impiden una materialización inmediata y el volumen de proyectos autorizados en los años anteriores fue escasa.

En este sentido, Marcos J. Lacruz, presidente de AVAESEN ha afirmado: «Estamos en el buen camino para protagonizar la transición energética desde nuestra región. La Comunitat Valenciana no puede dejar pasar el tren de la transición energética porque tenemos unas condiciones óptimas en la región y una cadena de valor de las energías renovables envidiables para ser un referente europeo en la generación de energías limpias».

Posible inflexión

El informe apunta a una posible inflexión. En 2024 se concedieron autorizaciones administrativas a más de 1.800 MW de nuevos proyectos solares y 104 MW eólicos, lo que puede significar un cambio de tendencia y una creciente instalación de proyectos renovables en nuestro territorio. Sin embargo, Avaesen advierte que, sin una mejora sustancial en los procesos de licencias, estos proyectos podrían quedarse bloqueados.

Otro de los puntos críticos señalados en el informe es la ausencia total de proyectos de baterías operativos en la Comunitat Valenciana, a pesar de que la región concentra el 50 % de la capacidad nacional de turbinación y bombeo gracias a una única instalación.

El desarrollo de almacenamiento energético es clave para garantizar la estabilidad del sistema, especialmente ante el futuro cierre de la central nuclear de Cofrentes.

Por otro lado, el informe destaca una caída del 16,7 % en las emisiones nacionales de CO₂ respecto a 2023, lo que confirma el impacto positivo de las renovables en el mix energético. En la Comunitat Valenciana, sin embargo, más del 64 % de la generación eléctrica aún procede de fuentes no renovables. En este sentido, Pedro Fresco ha comentado que el almacenamiento es «clave» para poder integrar más renovables en el sistema eléctrico, pero también para mejorar la robustez del sistema eléctrico y así evitar apagones como el del pasado 28 de abril. «Es la gran revolución energética de los próximos años», ha añadido.

«El reto ya no es técnico ni tecnológico», ha concluido Lacruz. «La Comunitat necesita de liderazgo público-privado, coordinación administrativa y un consenso social que permita desbloquear cientos de expedientes pendientes, como ya se está haciendo gracias a la voluntad del ejecutivo autonómico. De lo contrario, perderemos una oportunidad histórica de desarrollo sostenible y de atracción industrial basada en energía limpia y asequible».

Este informe ha sido elaborado por Avaesen como parte de la iniciativa Queremos Renovables. El informe completo se encuentra disponible para consulta y descarga en este enlace.