Trituran las patatas y cebollas en el campo por su bajo precio
Los agricultores de l'Horta optan por destruir sus cosechas porque los gastos de recolección superan lo que les pagan por sus productos
V. LLADRÓ
Jueves, 29 de mayo 2014, 00:07
valencia. Los agricultores de l'Horta de Valencia han empezado a destruir sus cosechas de patatas y cebollas al hundirse del todo el mercado. No hay precio digno en el campo. Se pagan miserias de tan sólo entre 5 y 10 céntimos por kilo, con lo que se recauda menos dinero de lo que cuesta recolectar la producción.
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La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha remarcado el carácter dramático de lo que está ocurriendo en el campo. Un kilo de patatas cuesta al menos 12 céntimos de producir; uno de cebollas, 15 céntimos como mínimo. Con lo que se paga, los productores ya sufren auténticas ruinas, pero intentan evitar que se sumen más pérdidas con los costes de recolección. De esta manera prefieren pasar los campos de tractor con 'rotovátor', que es la herramienta que desmenuza el suelo y con él todo lo que hay. Al menos las patatas y cebollas servirán de abono para siguientes cosechas.
Saturación de oferta
La principal causa de este descalabro económico, que afecta a las comarcas hortícolas valencianas, se debe en el aumento de producción en toda España y también en otros países europeos, especialmente Italia, según explica AVA. En Andalucía y Extremadura se ha incrementado un 30% la superficie dedicada a dichos cultivos y en Italia se ha doblado, mientras que Francia mantiene un considerable 'stock'.
Dos causas que han influido en este inusitado crecimiento de la oferta han sido los buenos precios de hace un año, que tentaron a plantar más, y la ausencia de fríos en casi toda Europa durante el pasado invierno, sin apenas heladas. Las consecuencias de esa sobreproducción se han plasmado en un mercado dominado por precios de ruina para los cultivadores valencianos.
Cristóbal Aguado, presidente de AVA, ha remarcado que «la catástrofe que estamos viviendo este año con la patata y la cebolla, que son producciones típicas e importantísimas de nuestra huerta, viene a sumarse a la nefasta campaña citrícola que ahora concluye y a los efectos devastadores que la sequía ya ha tenido en casi todas las producciones de secano y de regadío, por lo que estamos atravesando un año verdaderamente horrible para la agricultura y la ganadería que puede provocar que las cifras de abandono de explotaciones se disparen».
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El presidente de AVA agregó que los gravísimos problemas por los que atraviesan esta temporada las patatas y las cebollas «ponen de relieve la necesidad ineludible de que la nueva Organización Común de Mercado (OCM) de frutas y hortalizas aborde la cuestión y aporte soluciones concretas a estas situaciones de crisis de mercado, puesto que ya hemos visto que la nueva Política Agraria Común (PAC) no ofrece ninguna respuesta en esta materia».
Otro aspecto denunciable es que los precios de las patatas y cebollas siguen caros para los consumidores. En los supermercados siguen rondando el euro por kilo, y aún más, lo que no se corresponde con los precios de ruina que se reservan para el agricultor.
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