La guinda de un gran año
El Valencia Basket se juega la Liga a cara o cruz | «El equipo siempre transmite ambición», dice Rubén Burgos ante el partido que puede dar otro título y abrir la puerta a la Euroliga
El campeón de la Eurocup contra el subcampeón de la Euroliga, frente a frente. Con el balance totalmente equilibrado en el cara a cara: victorias, derrotas, puntos anotados y recibidos. Hoy esa paridad se romperá y no sólo entre el Valencia Basket y el Perfumerías Avenida. El baloncesto español, podría decirse que el europeo, latirá en femenino. Partidazo en Salamanca del que saldrá un equipo campeón y otra reivindicación del papel cada vez más pujante de la mujer en el deporte de élite.
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Esta es una filosofía que ha adoptado con fuerza el Valencia Basket y su apuesta ha dado frutos, incluso más rápido de lo esperado. «Queríamos debutar en Europa, sin invitación, pro méritos propios, y lo conseguimos acortando plazos. También tenemos en mente jugar la Euroliga y, por qué no, lograrlo ya», reflexiona Rubén Burgos, entrenador de un equipo que ha disparado el optimismo y la ilusión en el club taronja.
Ya no sólo por esa Eurocup lograda en la casi milagrosa y magistral acción de Raquel Carrera. «El equipo siempre me transmite ambición», apunta Rubén Burgos: «No se dejó llevar después de conseguir un título y afrontó la semifinal de la Liga contra el Spar Girona con la misma mentalidad y mejor aún. Eso habla muy bien de esta gente».
Que nadie lo dude. Hoy el Valencia Basket se dejará en Salamanca la gasolina que le quede. Luego vendrá para algunas el Eurobasket y los Juegos Olímpicos. Ya repostarán cuando puedan, pero esta tarde es el final del camino de una temporada complicada pero maravillosa.
«Ganar la liga significaría cerrarla con victoria», apunta Rubén Burgos. Sin excusas. La expedición taronja no tiene la obligación histórica de ganar esta liga. Tampoco siente la presión que sí puede pesar en un Perfumerías Avenida que viene dominando el baloncesto femenino español, salvo puntuales excepciones, precisamente desde la desaparición del Ros Casares. Pero el grupo, el taronja, sí quiere presión: «No sé si la temporada tal como ha ido estaba en nuestros mejores sueños, sí te digo que hemos afrontado la Eurocup, la Copa y la Liga con la ilusión de ganar cada título, y vamos igual a este partido».
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Con la misma dificultad añadida que el anterior, y que la final de la Eurocup: la duda hasta última hora de Laura Gil. La jugadora arrastra las mismas molestias que la vienen lastrando en las últimas semanas y hoy mismo se probará. Dependiendo de las sensaciones, forzará y si no, el equipo deberá sobreponerse a esta adversidad, como ya hizo en Hungría y en el primer partido en Salamanca.
«Laura Gil nos da un plus por su calidad defensiva y la buena lectura ofensiva en la que ha sido su mejor temporada anotadora. Hoy es un día importante, Perfumerías Avenida te suele exigir tu 100% y nosotros sin ella no lo tenemos», apunta Rubén Burgos, que inmediatamente puntualiza: «Todas las jugadoras están dando lo máximo y en este partido volverán a hacerlo».
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El Perfumerías Avenida, de cara a este encuentro, sí quiere exprimir cada uno de sus argumentos. Por ejemplo, no es baladí que el partido vaya a disputarse a las 19:00. No quieren en el club que se repita la imagen del público abandonando la grada justo al inicio de la prórroga del primer partido, donde acabó imponiéndose el Valencia Basket. Con tres horas hasta el toque de queda, muy larga tiene que hacerse la final para que la gente deba desalojar el pabellón antes de que acabe. En Salamanca vincularon este hecho a la derrota, argumentando que lastró anímicamente al equipo local. También habló Roberto Íñiguez de los árbitros, algo en lo que no quiere entrar Rubén Burgos: «Imagino que si alguien dice algo es porque lo siente. Yo creo que a lo largo de la temporada unas veces te sientes beneficiado y otras, perjudicado».
El Valencia Basket notará el respaldo de la directiva del club, que estará hoy en Salamanca. «Notamos la apuesta durante toda la temporada», constata Rubén Burgos. También presenciarán el partido en directo el conseller Vicent Marzà y la concejala de Deportes en Valencia, Pilar Bernabé. Y mientras, en Valencia, la afición sufrirá a la distancia. El equipo quiere que el padecimiento sea menor que en otros partidos, pero... «Queremos resolverlo antes, pero si me dan a firmar que jugamos cuatro prórrogas y nos llevamos la Liga, ni lo dudo... Ahora mismo me interesa más ganar que la salud de nuestros aficionados», bromea el preparador taronja.
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Avisa de lo evidente. De la potencia de un rival liderado por Katie Lou Samuelson y Nikolina Milic, pero que es mucho más que estas dos jugadoras. «Para que ellas aparezcan, el resto del equipo te ha hecho un trabajo de desgaste», indica Rubén Burgos: «Yo creo que somos dos equipos que nos parecemos en la idea de ir creciendo desde la defensa, desde la colectividad en lugar de la individualidad».
Irremediablemente, esta tarde se romperá el equilibrio que han mantenido Valencia Basket y Perfumerías Avenida en esta temporada. «Va a ser complicado que en el futuro se repita un año así por parte de dos equipos. Este ha tenido muchos condicionantes por las burbujas, con menos partidos y luego, sin público, jugar en territorio hostil no afecta tanto. Quizás por ello nos hayamos dejado menos victorias por el camino», reflexiona. Eso el tiempo lo dirá. Lo que está claro es que se ha abierto una era de una maravillosa rivalidad entre dos grandes contrincantes.
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