El futuro del Huracán pende de un hilo

El Huracán Valencia se encuentra en el momento más delicado de su corta historia, ya que tras quedarse a un solo paso de ascender a Segunda División a mitad de 2015 se ha visto inmerso en una grave crisis económica en la segunda parte del año que podría desembocar en la desaparición del club.

A pesar de la gran temporada 2014-15, en la que el equipo llegó hasta la eliminatoria final de ascenso frente al Huesca, el club valenciano agotó sus recursos económicos y comenzó la nueva campaña en una situación muy precaria.

De hecho, Antonio Hernández, ex presidente de la entidad, trató de conseguir nuevos ingresos aunque no lo logró y acabó abandonando la dirección junto a su junta directiva.

La plantilla rojiblanca, que sólo ha cobrado media mensualidad de agosto, siguió compitiendo pero a la espera de soluciones, que llegaron con el cambio de la directiva y la llegada de Carlos Sanchis a la presidencia.

Sin embargo, las soluciones tampoco llegaron y las deudas se ampliaron semana tras semana. Los jugadores, hartos de promesas incumplidas, buscaron una solución con la llegada de nuevos inversores, pero que todavía no han llegado a un acuerdo para ponerse al frente.

Mientras, en lo deportivo, el Huracán siguió compitiendo aunque sin obtener los resultados esperados. Así, cierra el año a tres puntos de la promoción de descenso después de la retirada de dos puntos por el impago de los arbitrajes como local.

En pleno mes de diciembre, la directiva y la plantilla negocian una salida para mantener viva la llama de Huracán, que ya ha visto como su mejor jugador, Aridai, ha abandonado la disciplina en busca de nuevas experiencias para seguir viviendo del fútbol.

El resto de la plantilla espera acontecimientos durante sus vacaciones navideñas para saber si regresará a la competición con el nuevo año o, si por el contrario, ya no vuelve. Los futbolistas están citados el próximo 28 de diciembre y nadie descarta la opción de la desaparición del primer equipo.