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El artista Joan Cardells. MONZÓ
Bancaja prepara un tributo a Joan Cardells

Bancaja prepara un tributo a Joan Cardells

El centro cultural trabaja en una retrospectiva sobre el fundador de Equipo Realidad, que murió en julio | La exposición, prevista para el próximo año, reunirá piezas procedentes de la familia y coleccionistas privados

Carmen Velasco

Valencia

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Viernes, 27 de septiembre 2019, 23:34

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Joan Cardells (Valencia, 1948) falleció el pasado julio. Fue un adiós sobrevenido que dejó el panorama artístico de la Comunitat sin uno de los más destacados artistas valencianos del último tercio del siglo XX. Renovador de la escultura y valedor del dibujo, Cardells fue un artista admirado por sus compañeros y por la crítica.

La obra de Cardells se encuentra en las colecciones del IVAM, el Reina Sofía, Fundación la Caixa, el MIE de Japón y el Chase Manhattan Bank de Nueva York, entre otras instituciones. El año 2000, la Diputación de Valencia lo distinguió con el Premio Alfons Roig. La próxima temporada Valencia ofrecerá la oportunidad de disfrutar de la magnitud de la obra de Cardells gracias a una retrospectiva que contará con piezas de la familia del artista valenciano y de importantes coleccionistas privados, según ha podido saber LAS PROVINCIAS. La Fundación Bancaja es la institución que promueve esta muestra. Desde el centro cultural, no obstante, guardan silencio sobre la iniciativa porque, explican fuentes de la entidad a este periódico, la temporada expositiva para 2020 aún no ha sido aprobada por los órganos de la fundación.

Se da la circunstancia que la institución de la plaza Tetuán tiene en cartel hasta el 13 de octubre 'Jorge Ballester. Entre el Equipo Realidad y el silencio', la primera muestra antológica de la trayectoria de Jorge Ballester (Valencia, 1944-2014), que junto a Cardells, fundó el Equipo Realidad (1966-1976).

Equipo Realidad, que cultivó una figuración crítica y un pop art que hundían sus raíces en la apropiación de imágenes de la realidad cotidiana y de la historia del arte, en la negación del arte como objeto de transacción y en la denuncia social y política, dio como fruto una serie de cuadros muy importantes en la historia de la plástica española. «Mi etapa con Equipo Realidad fue entretenida e interesante, pero la de ahora es apasionante», dijo en una entrevista con este periódico hace cinco años. Ballester y Cardells fueron artistas combativos y rebeldes.

Cardells ingresó en la Real Academia de San Carlos en 2015. Su discurso fue una declaración de amor al dibujo: «Mis obras, en algún momento, piden ser modelos para ser dibujadas y yo atiendo la petición y a ello me pongo». Y confesó: «Mi patria es el dibujo –el mío– y mis esculturas son sus auxiliares». En su discurso contó que en sus paseos cotidianos se fijó bien «con la pieza de Vergara en el remate del Palacio de la Aduana». También en la figura de Sant Pere Pasqual en el Paseo de la Pechina y el grupo escultórico de la iglesia de San Martín, «especialmente el caballo». Describió sus materiales habituales en la escultura –uno de ellos, la uralita– y su paulatina incursión en el ámbito «del claroscuro, de la grisalia, del humo…. Del dibujo».

Estudió en la Escuela de Artes y Oficios y en la Escuela Superior de Bellas Artes de Valencia. «Con lápiz y papel se puede reflejar todo. El dibujo es cómodo y arriesgado, porque se juega con las luces y las sombras. Además, te permite fumar un cigarro y beber una copa mientras lo estás haciendo», explicó a LAS PROVINCIAS con motivo de una exposición en la Galería Punto en 2014.

Cardells, que también formó parte del grupo Estampa Popular (1964-1968), apenas coqueteó con el color. «Mis primeros libros de Historia del Artes eran en blanco y negro. Recuerdo que me resultaron decepcionantes comprobar que las obras originales, que se exponían en el Prado, eran en color. También me decepcionó ver el color en Goya», rememoró entonces. Apasionado de su trabajo, siempre tenía a mano un lápiz. «Nunca sabes muy bien qué va a pasar a 10 centímetros del lápiz. Uno busca siempre el placer, el placer de pintar».

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