Sin clase de Educación Física por la caída de una valla en un instituto de Valencia

La zona de patio que recae a los tramos que se mantienen en pie está precintada por decisión del equipo directivo a raíz del informe de bomberos, que acreditó que el cerramiento presenta problemas estructurales. Esto inutiliza la zona de canchas deportivas, lo que imposibilita que se impartan la mayoría de clases de Educación Física -la AMPA calcula que se han perdido 900 horas lectivas diarias, contando las de todo el alumnado- o que el patio pueda ser utilizado por el Club de Basket Isabel de Villena para sus entrenamientos.

Ante la situación la organización ha reclamado a la administración «que se realice con la máxima urgencia la reparación adecuada y duradera de todo el vallado, instalando un nuevo cierre que contemple todas las medidas necesarias de seguridad y que permita la práctica deportiva segura y el ocio en la actividad escolar de los seiscientos jóvenes que acuden al instituto».

Las familias del centro recuerdan que aunque «la actuación de los bomberos fue urgente, retirando las partes más peligrosas, en su informe ya denunciaron que se había observado que toda la valla perimetral se encontraba en una situación pareja a la caída, con los amarres oxidados o con elementos tubulares con la sección completamente perdida debido a la oxidación».

La organización recuerda que si bien la parte interior del centro está acotada mediante vallado de obra para evitar que los alumnos se aproximen, un hipotético desplome también puede producirse hacia el exterior, recayente a la calle Isabel de Villena.

Además, explican que en un primer contacto con la Conselleria de Educación se ofreció «una solución inaceptable: reinstalar la misma valla deteriorada». Y como alternativa, que fuera el propio instituto el que se hiciera cargo de una reparación parcial.

«Rechazada esta estrambótica propuesta nos hemos visto envueltos en una serie de gestiones administrativas para licitar la obra completa de reparación total de la parte caída y refuerzo de la no caída y solicitar autorización del gasto», prosigue la AMPA, que denuncia que a día de hoy desconocen el proyecto definitivo y los plazos de ejecución.

«Es inaceptable desde cualquier punto de vista que tras un fenómeno atmosférico de fuerza mayor la administración sea incapaz de dar una respuesta ágil que permita dar continuidad al normal funcionamiento del único instituto de un barrio históricamente castigado», se concluye.