Los socialistas arropan al alcalde ante la moción de censura de populares y C's
Portavoces, alcaldes y cargos del PSPV restan credibilidad a los argumentos de la oposición para recuperar el gobierno municipal
Fernando Amat
Martes, 3 de enero 2017, 00:33
El PSOE comarcal y alicantino dio ayer la cara por el equipo de gobierno de Almoradí. Alcaldes, portavoces y miembros de agrupaciones socialistas de la Vega Baja recalaron en el municipio para demostrar que conforman un partido que reniega de la moción de censura que presentaron PP y Ciudadanos y que calificaron de «injustificada». El primer cambio de gobierno forzoso en la Vega Baja llega con el año nuevo y con una escenificación de unidad socialista.
Algunos simpatizantes se acercaron para escuchar las voces de las máximas autoridades del partido como la de la vicesecretaria de Política Autonómica del PSPV, Ana Barceló, y la de la secretaria de Organización provincial, Toñi Serna. Arremetieron contra el PP pero sobre todo contra la formación naranja a la que tacharon de apoyar a un partido sobre el que se sospecha un caso de presunta corrupción, según expusieron los socialistas.
El primer edil, Jaime Pérez, dijo que «nos arrebatan la Alcaldía pero la propuesta que han realizado para presentar la moción de censura no se fundamenta». Para el alcalde el municipio funciona y prospera a pesar de que en el último año haya gobernado solo con el apoyo de Izquierda Unida. El pacto de gobierno que salió en mayo del 2015 expiró seis meses después. El gobierno bipartito no pudo sacar adelante los presupuestos y este año no se había presentado ni un borrador para no volver a prorrogarlos. El bloque unido de PP y C's era evidente desde hace meses.
Pérez recordó que la negociación con la formación que dirige Albert Rivera constaba de 28 puntos que se debían cumplir y que «el segundo era no apoyar a imputados» a lo que añadió que «la que va a ser alcaldesa va a ser investigada por un caso de presunta malversación de fondos públicos y prevaricación», en alusión a la popular María Gómez.
Por su parte, el secretario comarcal del PSOE, Manuel Pineda, valoró que «no he tenido ninguna propuesta seria sobre una planta de transferencia de residuos en Almoradí». Así, sacó esta propuesta del argumentario del futuro pacto de gobierno. Durante su discurso el secretario comarcal insistió en que «las dos 'Marías' se unen con intereses ocultos para dar este golpe, que aunque sea democrático, no es lo que demandó la ciudadanía». Para el socialista las urnas dijeron en mayo del 2015 que el PP debía descansar varios años de su gestión al frente del Ayuntamiento después de varias legislaturas.
También fue tajante la secretaria de Organización de Alicante, Toñi Serna, que calificó al PP de «corrupto porque ha dejado las arcas municipales vacías en la mayoría de ayuntamientos de la provincia y de la Comunitat». Para Ana Barceló «el matrimonio de conveniencia es para los dos partidos pero no es un pacto de conveniencia para la ciudad de Almoradí» e insistió en que C's facilita la entrada al gobierno de personas de dudosa honorabilidad. Asimismo insistió en que Ciudadanos debe posicionarse en un lugar contrario a la corrupción «pero tiene que saber qué quiere ser de mayor porque pretende una cosa y la contraria».
En el caso contrario el coordinador comarcal del PP, Adrián Ballester, valoró ayer que «la moción de Almoradí es la evidencia de que los gobiernos entre minorías que inventó la izquierda hace año y medio no funcionan».
Ante las acusaciones contra María Gómez, el popular advirtió que va a presentar una querella por injurias y calumnias contra el alcalde actual, Jaime Pérez, y contra los dirigentes socialistas ante las afirmaciones de imputación de la candidata a la Alcaldía. «Gómez es una persona honrada y honesta, y lo único que han querido es manchar su nombre con una denuncia que carece de fundamento y legitimidad por el pago del salario al secretario del Ayuntamiento, con todos los informes favorables», indicó.