El Consell deja en manos de cien empresarios el relevo de la cúpula de IFA y evitar el cierre

La escasa sintonía entre la actual cúpula directiva de la Institución Ferial Alicantina (IFA), que sufre un 'agujero' económico y financiero de más de 70 millones de euros, y los dirigentes de la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo ha quedado patente desde después del verano en varias ocasiones. Ni el conseller Rafael Climent, ni el director general de Comercio, Natxo Costa, (este último en una entrevista en 'La Verdad') han descartado el relevo de, al menos, el presidente, Manuel Román, y el director, Antonio Galvañ. Hoy se reúnen en IFA, convocados por la Conselleria, casi cien empresarios (a última hora de ayer habían confirmado su asistencia unos 80) de todos los sectores productivos. A ellos les corresponderá no solo decidir, a partir de ahora, el relevo de la cúpula directiva de IFA, sino también el modelo de negocio e incluso si la entidad cierra o no definitivamente sus puertas, aunque la Generalitat no quiere la clausura.

Climent se reunió el pasado 26 de noviembre junto al propio Costa con el alcalde de Elche, Carlos González, y buena parte de su equipo de gobierno, preocupados por la situación de asfixia financiera e inviabilidad de IFA. Fue en esa cita cuando anunció la cumbre que hoy tiene lugar.

El director general de Comercio reiteró ayer, en declaraciones a este diario, cuál es la hoja de ruta sobre la institución ferial inaugurada a principios de la década de los 90 por el gobierno del socialista Joan Lerma: «Si hay demanda de todos los sectores productivos de la provincia y se justifica su existencia, entonces el Consell saldrá al rescate y asumirá toda la deuda de más de 70 millones de euros, como ha dicho ya el conseller Climent», explica Costa. Deja claro que, pese a cuestionarse al equipo directivo por activa y por pasiva desde la llegada del bipartito PSPV-Compromís al Consell, «hoy no habrá ceses ni relevos, pues eso lo tienen que decidir los propios empresarios alicantinos, así como el modelo de gestión que se propone para garantizar la viabilidad futura». Costa ya dejó claro en una entrevista en este diario que la gestión podría ser parcialmente privatizada, «aunque es un sistema que, por principios, no nos gusta», añadió. Lo que sí aclara, de nuevo, Costa es que «es falso el sufrido debate de que Feria Valencia permanecerá y Alicante se cerrará, porque el Consell quiere las dos ferias abiertas y con subvenciones, pero si los propios empresarios determinan su viabilidad y esa necesidad la vamos a pulsar mañana (por hoy)».

En algunos círculos empresariales se tilda la convocatoria de «evento asambleario» con el que el Consell justificaría o haría descansar sobre el empresariado el rescate multimillonario a ojos del contribuyente. «Si gobiernan que ejecuten lo que consideren mejor para todos, pero que tomen decisiones», asegura un importante dirigente sectorial. Otros acuden a la cita a verlas venir, pero sin demasiada convicción a la hora de tomar decisiones y menos a mano alzada.

Mientras, en el seno de la Conselleria ha generado malestar una suerte de citas del comité de dirección paralelas a las que no se convoca a todos sus miembros. Incluso tienen nombre propio: 'Els dinarets de IFA'. La última comida tuvo lugar el día 1 en un conocido restaurante de Elche Parque Industrial. Los comensales pagaron de su bolsillo el menú, a razón de 25 euros por persona. Pero se interpreta desde la Conselleria que «es una deslealtad no contar con todos».