El Valencia inscribe en LaLiga a dos de sus fichajes

El Valencia acaba de inscribir en la mañana de este lunes a dos de sus tres fichajes en este mercado estival. Los afortunados, en este caso, son las dos últimas incorporaciones que han llegado a la entidad de Mestalla: Julen Agirrezabala y José Copete. El portero vasco llega procedente del Athletic de Bilbao en forma de cesión durante un año y con una opción de compra entre diez y once millones de euros. El guardameta de 24 años tiene la difícil tarea de hacer olvidar a Giorgi Mamardashvili, que en las últimas cuatro temporadas ha sido el guardián bajo los palos del club blanquinegro, convirtiéndose en uno de los mejores del mundo en su posición, algo que hizo que el Liverpool de Arne Slot se fijase en él y por el que terminase pagando 30 millones de euros. El georgiano estuvo cedido la temporada pasada en el Valencia y ahora, los de Mestalla han encontrado en Julen Agirrezabala el sustituto del georgiano. Además, ya ha disputado sus primeros partidos esta pretemporada y ha dejado buenas sensaciones.

El segundo de los jugadores que ha sido inscrito es José Copete, el central de 25 años, que llega procedente del Mallorca por 3,6 millones de euros más variables. También estará disponible para la jornada 1 contra la Real Sociedad. Además, ya pudo disputar su primera media hora como valencianista en la derrota contra el Borussia Monchengladbach por 2-0 este sábado pasado. Es más, en declaraciones posteriores ya apuntaba que no era el estreno esperado, pero que había que seguir puliendo detalles para llegar a tope al inicio de LaLiga.

Copete también tiene la difícil papeleta de cubrir el hueco que ha dejado Christian Mosquera, que recientemente ha fichado por el Arsenal por casi 20 millones de euros y ha sido uno de los fijos de la defensa valencianista estos dos últimos años. Por el momento, el único que no ha sido inscrito de las tres incorporaciones es Dani Raba, quien fuese el primero en llegar tras acabar contrato con el Leganés. Pese a esto, ya ha marcado su primer gol como valencianista ante el Olympique de Marsella.

El Valencia cerró la pasada temporada, a fecha de 30 de junio, con un margen de Fair Play Financiero positivo cercano a los 12 millones de euros. Esa cifra ha sido el punto de partida sobre el que el club ha comenzado a realizar los cálculos necesarios para cuadrar la plantilla antes del cierre del mercado estival.

Las recientes ventas de Yarek y Mosquera, por un total de 25 millones en cantidades fijas (los variables se contabilizarán únicamente cuando se cumplan ciertos objetivos), no han incrementado el límite salarial para este mercado, ya que se realizaron con la temporada contable 2025-26 ya en curso. Sin embargo, estas operaciones acercan al club al objetivo económico. Si el Valencia supera los 30 millones de euros en ventas netas a lo largo de esta campaña —y las de Yarek y Mosquera computan como ventas netas al tratarse de canteranos—, podrá empezar a generar margen positivo en el límite salarial.

A esos 12 millones iniciales hay que restar varios conceptos: los sueldos y amortizaciones de Cenk y Cömert tras su regreso de cesión; los salarios de Raba, Agirrezabala y Copete; y la amortización correspondiente a este ejercicio del central, que asciende a 875.000 euros. Con estos compromisos asumidos, a día de hoy el club no tiene margen suficiente para afrontar dos operaciones con coste de traspaso dentro del presupuesto autorizado por el máximo accionista, Peter Lim.

El caso más reciente que ilustra esta situación fue la negociación para el fichaje de Nicolás Fonseca. El Valencia estaba dispuesto a ofrecer hasta 4 millones de euros por el jugador uruguayo, pero necesitaba tiempo, ya que sigue priorizando la incorporación de un delantero centro de referencia, una operación que se perfila como la más importante del mercado. El Club León, propietario de Fonseca, se negó a esperar y exigía cerrar la operación de inmediato. Ante la falta de margen y la imposibilidad de ejecutar ambos fichajes a la vez, la negociación se rompió definitivamente, según confirman ambas partes.

Para ilustrar la situación: si el Valencia hubiera cerrado el fichaje de Fonseca por 4 millones, más un contrato con salario anual equivalente, habría tenido que asumir al menos 1 millón en amortización más el sueldo correspondiente al curso actual. Esa carga económica habría dejado sin espacio para el fichaje del delantero que Corberán ha solicitado para competir con Hugo Duro por un puesto en el once titular. Entre ellos, están Sadiq, Iván Azón, Borja Iglesias o Cyle Larin. En un contexto económico tan ajustado, el juego de las inscripciones —qué jugadores se registran y cuándo— se convierte en una herramienta clave para hacer malabares con el límite salarial y mantener la viabilidad del proyecto deportivo.

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