Las renovaciones de Guerra, Diego López y Tárrega se ultiman para el Naranja
Con la perspectiva complicada de llegar al partido de presentación con más fichajes, el Valencia acelera para cerrar las ampliaciones pendientes
Partiendo de la base de que ampliar un contrato en el Valencia de Peter Lim no significa labrar a fuego que se vaya a cumplir ... en su totalidad, puesto que en el proyecto de Meriton las cláusulas de rescisión son sólo una formalidad en un documento, sí que es cierto que una renovación suele ser la antesala de cumplir, por lo menos, el primer año de ese nuevo contrato. A falta de cinco días para la presentación del Valencia ante sus aficionados, un evento que se ha ido desinflando en los últimos años puesto que generar expectación alrededor de él sólo se consigue con grandes refuerzos, la entidad donde Ron Gourlay es el nuevo CEO de fútbol apura las operaciones abiertas para, al menos, llegar con alguna alegría al Trofeo Naranja. Con una operación entrada que, un año más, llega a dos semanas para comenzar la Liga muy parada, las tres renovaciones en marcha suponen un objetivo más asumible para ofrecer como una pequeña alegría.
Hay que partir de la base de que ampliar al alza tres contratos repercutirá en el límite salarial pero, en estos momentos, las operaciones que está poniendo encima de la mesa el Valencia sí que tendrían cabida. Es objetivo, el de llegar al partido contra el Torino con las ampliaciones de contrato de Javi Guerra, Diego López y César Tárrega pactadas es algo factible. En el caso del centrocampista de Gilet, las dos últimas conversaciones entre el club y su agencia de representación han servido para limar algunos aspectos. Partiendo de la base, algo importante, que marca la oferta de ampliación de contrato ofrecida por el Valencia hasta 2029 que elevaría su sueldo a los 3 millones brutos en la temporada que está a punto de comenzar. Es decir, triplicando su actual salario y poniéndole en el segundo escalón salarial del equipo donde, por ejemplo, también hay jugadores como Hugo Guillamón. Uno de los descartes de Corberán.
Para Javi Guerra, ese incremento salarial le llevaría a rozar los 16 millones brutos por cuatro temporadas, aunque si el Valencia acepta algunos retoques, en forma de bonus, esa cifra puede ser incluso superior. Para el técnico de Cheste, la continuidad del centrocampista es prioritaria. Más aún en una demarcación donde aún no ha llegado un recambio para Enzo Barrenechea. Del mismo modo, Corberán es consciente de que aunque renueve el jugador tendrá que contener la respiración para que en el tramo final del mercado, ningún club con la capacidad económica para poner encima de la mesa una oferta de al menos 25 de euros, necesite reforzar esa demarcación. Hace un año, Peter Lim volvió a marcar el camino con el canterano (como ha pasado en este mercado con Mosquera o Yarek) a la hora de aceptar ofertas por jugadores libres de amortización que lleguen a la cantidad mínima de tasación de cada jugador. En 2024, el Valencia tenía un acuerdo con el Atlético para traspasar al de Gilet pero todo se truncó porque el conjunto madrileño encontró a otro jugador.
Con Diego López, tal y como pudo confirmar este periódico, se ha avanzado mucho en los últimos días. La mejora en la negociación era más sencilla que con Javi Guerra, con lo que el acuerdo con el extremo asturiano puede llegar en los próximos días. También debería ser así con Tárrega, aunque es su caso es cierto que su agente, Fede Marco, expresó la pasada semana que no existe una urgencia para llegar a un acuerdo de ampliación de contrato. Al final, su caso es como el de Guerra. Si llega una buena oferta, dará igual.
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