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Valencia ya llora al Papa Francisco. El Miguelete ha comenzado, a eso de las 10.30 horas, el toque a Entrada o «toc de l'Entrà», con clamoreo final, que durará de dos a tres horas. Se hace manualmente gracias a la Associació de Campaners de la Catedral de València. Además, la torre repicará todas las tardes a las 19.30 horas hasta que el entierro del pontífice.
Según explica Francesc Llop, presidente de la entidad, «al principio es fácil que nadie se dé cuenta de que está tocando». Se trata de un repique distinto al toque de difuntos, conocido como «toc de l'Entrà», que se reserva para el fallecimiento del Santo Padre o del arzobispo. Empieza con repiques cada dos minutos, que se aceleran luego a cada minuto y luego a cada 30 segundos.
«Termina con un clamoreo final», cuenta Llop. Aunque no hay una duración marcada, se estima que ese clamoreo, que se compone de tres vueltas completas al campanario, ocurra entre las 12.30 y las 13 horas de este lunes, tal como explica el experto campanero. Después, a las 19.30 horas, y todos los días hasta que el Sumo Pontífice reciba sepultura, el Miguelete volverá a tocar con ese clamoreo tan distinguible. Cabe recordar que los toques manuales de campanas son Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
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La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha mostrado las condolencias del Consistorio por la muerte del Sumo Pontífice. En un mensaje en la red social X, ha dicho: «El Papa Francisco ha sido un faro de esperanza y fe para millones de personas. Un referente de humildad, cercanía y amor al prójimo. Desde Valencia, nos unimos al dolor por su partida. Descanse en paz».
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