Ribó pide al Consell desbloquear el PAI del Grao y pactar el desarrollo conjunto de Ciutat Vella
Illueca propone un consorcio conjunto para obras en el centro
Desbloquear el PAI del Grao y evitar la proliferación de solares y viviendas ruinosas en Ciutat Vella. Esos son los dos propósitos de la comisión que ha pedido recuperar el alcalde Ribó con la Generalitat, y que no se reúne desde 2018, en una carta enviada al vicepresidente segundo, Héctor Illueca.
Los dos asuntos conciernen directamente al segundo, dado que una entidad dependiente de la Conselleria de Vivienda ha adelantado unos 38 millones de euros del pago de las obras del circuito de Fórmula 1. La primera propuesta de Ribó fue compensar con la cesión de solares, unos 40.000 metros cuadrados, a la Administración autonómica, aunque esto fue rechazado de plano por la vicealcaldesa Sandra Gomez, quien se reunió hace escasas fechas con representantes de la conselleria.
Es más, la también concejala de Desarrollo Urbano señaló que ultima un acuerdo con los promotores inmobiliarios de ese PAI, que deben hacerse cargo según la edil de la mayor parte de las cargas urbanísticas. En ese proceso se ha colado la comisión pedida por el alcalde, con lo que se confunde la estrategia del Ayuntamiento.
Una confusión que puede generarse también en el desarrollo del Plan de Ciutat Vella. Illueca propuso en una reunión con Ribó una iniciativa para recuperar espacios públicos, aunque no trascendieron detalles. La semana pasada, Gómez dijo tras presentar la construcción de ocho viviendas en el Carmen que desconocía la propuesta. El gobierno municipal trabaja en este distrito a través de la empresa Aumsa para este tipo de proyectos. La carta enviada por el alcalde Ribó ofrece alguna pista más, como que el vicepresidente segundo ofreció crear un consorcio conjunto para el desarrollo del distrito.
El primer edil señala que quiere «dejar atrás la Fórmula 1 que hipoteca un desarrollo clave en el frente marítimo y el Parque de Desembocadura». Para la revitalización del centro histórico, señala especialmente los barrios del Carmen, El Pilar y El Mercat. En la misiva, Ribó ha solicitado el nombramiento de las personas que deben componer la comisión de seguimiento según el convenio que se firmó en 2007 entre el consistorio y la administración autonómica para el desarrollo de infraestructuras viarias entre la ciudad y el puerto.
Esta mesa bilateral tendría que convocarse oficialmente a partir del 20 de marzo con el objetivo, en palabras del alcalde, de «la extinción del actual convenio y la redacción de uno nuevo» que resuelva los costes que generaron las obras del trazado, que alcanzan los 38 millones de euros. «Es momento de dejar atrás la Fórmula 1 —ha recalcado Ribó— para construir, conjuntamente y desde la gestión pública, un barrio inclusivo y con vivienda social» en esta zona de los Poblados Marítimos.
La otra cuestión que ha reivindicado el alcalde consiste en la formalización de un grupo de trabajo que «busque la forma de colaboración público-privada con los promotores de las unidades de ejecución pendientes de desarrollo en el Plan de Ciutat Vella». Para el máximo responsable municipal, esta tarea resulta «imprescindible» para «avanzar en una estructura sólida que fomente la rehabilitación» y permita compatibilizar la actividad turística del distrito con los usos comerciales y residenciales.
El alcalde se ha referido a este grupo como una iniciativa complementaria al consorcio para la regeneración urbana de Ciutat Vella, cuya puesta en marcha ha propuesto la Conselleria de Vivienda. Así, entre sus funciones se encontraría el ofrecimiento y difusión de «las diferentes herramientas que cada administración puede aportar, tanto desde las oficinas de vivienda, urbanismo como de la energía».