El museo de la Semana Santa Marinera, a 45 grados y sin aire acondicionado
La Junta Mayor se ve obligada a trasladar la asamblea general a una cofradía para evitar golpes de calor| La presidencia informa a la concejalía de Fiestas la preocupación de que el calor afecte a las tallas de madera de las imágenes y a la policromía
Lola Soriano Pons
Valencia
Martes, 8 de julio 2025, 12:03
Increíble pero cierto. El museo de la Semana Santa Marinera de Valencia está que hierve. El recinto cultural, que también alberga las dependencias de la ... Junta Mayor, está alcanzado temperaturas de entre 37 y 45 grados en estos días en que el sol aprieta.
De hecho, este martes la Junta Mayor tenía convocada una asamblea general este martes, a las 22 horas, con las cofradías, hermandades y entidades penitenciales en el salón de actos del museo, en la primera planta del edificio que está en la calle del Rosario, y han tenido que cambiar de ubicación e irse a la sede de una hermandad asociada para poder hacer la reunión.
«Hay días que se han alcanzado los 45 grados en el museo y no podíamos arriesgarnos a convocar la asamblea con esas temperaturas y que alguien sufriera un golpe de calor», indica Carles Genís, presidente de la Junta Mayor de la Semana Santa Marinera.
Como alternativa urgente, tal como detalla, «hemos tenido que pedir a la hermandad de la Crucifixión del Señor que nos ceda su sede, que está próxima al museo, y sí tiene aire acondicionado para hacer la reunión».
Del mismo modo, añade que han tenido que acotar el número de participantes. «Normalmente en las asambleas vienen tres delegados en representación de cada colectivo y, nos juntamos unas 105 personas, y hemos tenido que enviar una circular para pedir que sólo venga un delegado por hermandad para poder celebrar la asamblea».
Y es que al problema de las altas temperaturas que se están alcanzando este verano se suma el hecho de que «la máquinas de aire acondicionado hace seis o siete años que no funcionan. Este mismo lunes volví a informar a la concejalía de Fiestas, que es la que gestiona el museo, pero siempre nos dicen que están en ello y así llevamos unos siete años, sin solución alguna», comenta Genís.
Del mismo modo, ha tenido que reducir el número de horas de las personas que están en las oficinas de la Junta Mayor «porque a partir de las 14 horas no se puede estar en el recinto. No se puede trabajar en esas condiciones porque les puede pasar algo».
Además de la insostenible situación para los usuarios del museo y de las dependencias de la Junta Mayor, Genís advierte «que estas temperaturas en periodos prolongados está comenzando a afectar a las imágenes religiosas que hay expuestas porque con los cambios de temperatura y las dilataciones se pueden agrietar. Y también acabará afectando a la policromía y la cuestión es que ya son varios los años en los que se están alcanzando altas temperaturas, no es algo pasajero».
Por eso piden que se dé ya una solución a los problemas del aire acondicionado «porque ya está afectando al patrimonio y, además, puede producir problemas de salud, con golpes de calor».
Además, lamentan que el montacargas para personas con movilidad reducida «lleva seis años sin funcionar y hay presidentes de colectivos que no pueden acudir a las reuniones porque son mayores y en un caso, porque va en silla de ruedas, y no puede acceder al salón de actos» y añade que una vez «se quedó el montacargas estropeado y tuvimos muy complicado poder bajar a una persona».
No es la primera vez que el museo de la Semana Santa Marinera tiene problemas. En noviembe de 2023 ya avisaron que había problemas de humedades y se tuvo que retirar carteles para evitar que se dañaran y ya se advirtió que también acabaría afectando a las imágenes.ç
Por otro lado, no hay que olvidar que siguen pendientes las obras de ampliación del museo y el traslado de las oficinas de la Junta Mayor a unos edificios contiguos.
Críticas de Compromís
Si bien el proyecto de rehabilitación y mejora del museo de la Semana Santa Marinera y las instalaciones de la Junta Mayor data del gobierno de Ribó, finalmente no llegaron a tiempo y se perdieron lod fondos europeos.
A pesar de que no lo pusieron en marcha, hoy desde Compromís quieren recordar que «el gobierno de Catalá lleva dos años paralizando la intervención global sobre este museo, que además de algunas deficiencias estructurales, también daba respuestas a la climatización y la ampliación del mismo».
Según el concejal Pere Fuset, «Catalá afirmó que lo asumiria con fondos propios. No solo no ha sido así, si no que PP y VOX han tumbado las diferentes mociones que hemos elevado al ayuntamiento para acometer el proyecto, que deje de ignorar ya a la segunda fiesta mas importante de la ciudad y a su patrimonio en peligro por la dejadez de un gobierno que solo tenia que dar continuidad a un proyecto en marcha que han paralizado«.
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