Día 'D', hora 'H' para Ricard Camarena
Bombas Gens debe ser su definitiva consagración, lo que en el argot gastronómico significa que la Michelin le otorgue la segunda estrella
ANTONIO VERGARA
Sábado, 2 de septiembre 2017, 16:11
Tiene éxito el nuevo restaurante de Ricard Camarena, inaugurado el pasado mes de julio en lo que fue la fábrica de Bombas Hidráulicas Carlos Gens SL. La construyó, en 1930, el reputado arquitecto Cayetano Borso di Carminati.
Está en el barrio de Marchalenes, al que ha enriquecido culturalmente y 'per Amor a l'Art', ya que la iniciativa de este gran complejo polivalente fue una idea de la 'Fundació per Amor a l'Art', en cuya cúpula, amplia, figura el prestigioso Vicent Todolí (exdirector de la londinense Tate Gallery) y mujeres muy capacitadas. José Luis Soler, uno de los interproveedores de Mercadona, ha colaborado en la financiación del proyecto, que incluye áreas para la investigación de 'enfermedades raras' -la de Wilson-, un centro de acogida educativa para la infancia y la adolescencia desvalidas, centro de exposiciones y el ya citado restaurante de Camarena.
Resulta que Cayetano Borso di Carminati fue amigo de mi padre. Ambos militaron en la Derecha Regional Valenciana de don Luis Lucia Lucia, condenado a muerte tras la Guerra Civil por sus 'veleidades republicanas'. Finalmente, le fue conmutada la pena por la de prisión y luego confinamiento. Casualidades de la historia.
Como observamos -yo, el primero- esta sección facilita innumerables circunloquios, no en vano se titula 'Menús Variados'.
Otra perífrasis. He seguido la carrera de Ricard Camarena desde el septiembre azul de 2005. 1 de octubre de 2004, él y su novia, Mari Carmen Bañuls, habían inaugurado Arrop, en Gandia, la 'patria de la fideuà'. Camarena procedía de la piscina del polideportivo de Barx (donde nació, en el pueblo, no en la piscina). Entre 2001 y 2004 se fogueó entre bikinis atractivos y desagradables masas adiposas.
Un día pensaron que ya les había llegado la hora de ofrendar a Gandia un restaurante de categoría y una cocina moderna y creativa. La carta, breve, estaba escrita en 'valencià normatiu' y no en castellano ni en bilingüe. Le aconsejé que se olvidara del 'valencià normatiu' porque el horno no estaba para bollos y además en verano Gandia es la playa de los madrileños y de otras regiones.
Y a la 'primera cullerà, mosca'. En su afán por homenajear a la denominada 'fideuà gandiense', que no es una invención de esta villa de La Safor -he comido 'fideuàs' hasta en Port Bou-, insertó en la carta la 'fideuà con pescado a banda, para sorpresa de los immovilistas' como escribí en 2006. Una herejía. Y eso que Camarena se limitaba a recrear el recetario comarcal o a revisar/modernizar maneras distintas de cocinar o combinar determinadas materias primas del terreno.
Del 'período gandiense' tengo anotados en mi blog de 'Paparrutas' algunas creaciones muy 'revolucionarias': el aceite de la sardina de bota aplicado al bonito templado, uva y emulsión de pimiento verde (versión gastronómica de un 'esmorzaret molt del poble'); 'pilota de putxero' (el cocido autóctono) con un pensamiento de 'foie gras' y arroz en infusión; pescado de la lonja con 'trinxat' de patata, caldo trabado de galeras y aceite de majada; gazpacho de setas y pichón; arroz de chipirones a la plancha y cremoso de alcachofas; atún de 'sorra' con tomate y sopa de pan tostado; o pescadilla eviscerada y curada en sal durante dos días (homenaje a nuestra cultura de las salazones). Su propuesta posibilista/reformista no fue bienvenida en Gandia y La Safor.
Naturalmente, emigró a Valencia y abrió Arrop Valencia (en el hotel Caro) y Ricard Camarena Restaurant. No tuvo éxito su asociación con Ricardo Gadea cuando se les ocurrió abrir, en 2006, una especie de Zara: Fudd. El espacio culinario (el comedor) era un desatino. La comida estaba bien, un Zara a 30 euros de media. Pero el espacio culinario...
¡Tachín, tachín! Comí el 13 de julio en Ricard Camarena/Bombas Gens. Debe ser la definitiva consagración de Camarena, lo que en el argot gastronómico significa que la Michelin le otorgue la segunda estrella, calificación que le ayudará mucho a 'tout le monde': Camarena, José Luis Soler y la 'Fundació per Amor a l'Art'. Comí muy bien. Quien desee leer mi crónica del almuerzo podrá consultarla a partir del 15 de septiembre de 2017 en mi blog (debajo de mi sombrero).