Estaciones de cloro en la red de riego contra la legionella en Valencia
El Ayuntamiento adaptará 12 pozos para el baldeo de calles y el suministro a jardines con el fin de eliminar la bacteria
La actividad de algunos sectores económicos volvió ayer a la Comunitat de manera paulatina y lo mismo sucedió con las obras pendientes en el Ayuntamiento, aunque con un matiz importante, ya que sólo se retomarán las suspendidas el pasado 1 de marzo con motivo de las Fallas y se dejarán aparcadas de momento las no iniciadas.
Una parte de las intervenciones se refieren a la red de saneamiento y alcantarillado, cuya concejala, Elisa Valía, indicó ayer que estemes de confinamiento se ha seguido trabajando en las actuaciones de emergencia, dado que afectaban a la contrata y contaban con garantías de protección para los trabajadores.
Entre las pendientes habló de la construcción de estaciones de cloración en una docena de pozos que surten a la red de riego de jardines y baldeo de calles. Se trata de una medida preventiva contra la legionella, dado que un análisis de las instalaciones desveló rastros de la bacteria.
El agua de baja presión no está potabilizada, por lo que su cloración permitirá garantizar su calidad para el riego y limpieza de las calles. Igual sucede con las fuentes ornamentales, donde otro contrato del Consistorio sirve para su desinfección periódica.
Otras obras que se harán serán la reparación de un colector del alcantarillado en la esquina de la Gran Vía Marqués del Turia y la calle Isabel la Católica. La previsión es cambiar algo más de un centenar de metros en la primera calzada, mientras que se hará lo mismo entre la segunda y Cirilo Amorós. "Hemos hecho inspecciones diarias", comentó.
En el puente del Real también hará otra obra, mientras que en el suministro de agua potable, indicó que uno de los problemas ha sido la falta de hormigón fresco a la hora de reparar fugas. En la planta depuradora de El Saler también se acometerán distintas mejoras, igual que ocurre con otra tubería en Pinedo.
Las obras vuelven a los Tinglados
Por otro lado los Tinglados 4 y 5 de la Marina son dos de los tajos de obra paralizados hace un mes que ahora podrán volver al plan previsto de rehabilitación. Los recintos servirán para equipamientos culturales y sedes de empresas, según el plan de usos de la dársena. La concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, comentó que se retoman los proyectos de reurbanización de la calle Murta en Benimaclet; la conexión peatonal de la calle Just Ramírez, en Zaidía; la electrificación y obras de urbanización del entorno de la calle Ángel Villena, en Quatre Carreres; las obras de acondicionamiento en las calles Sant Salvador y Caroig, en Castellar, entre otros.
Otros trabajos que volvieron a funcionar ayer son la rehabilitación como centro de mayores de la antigua fábrica de aceite de Marxalenes, la excavación arqueológica en San Vicente de la Roqueta, o la construcción de un equipamiento sociocultural en la plaza Obispo Laguarda, en el barrio de Torrefiel. Otros ocho proyectos no iniciados se dejarán para después de la derogación del estado de alarma.
