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Marta Calvo. LP
Marta Calvo desaparece en Manuel | El sospechoso de la desaparición de Marta Calvo limpió la casa antes de huir

El sospechoso de la desaparición de Marta Calvo limpió la casa antes de huir

La Guardia Civil continúa la búsqueda del hombre con antecedentes policiales que mantuvo una cita con la joven en una vivienda de Manuel

J. MARTÍNEZ / B. GONZÁLEZ

VALENCIA/MANUEL.

Miércoles, 27 de noviembre 2019, 00:37

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El principal sospechoso de la desaparición de Marta Calvo, un joven colombiano con antecedentes policiales en Italia, limpió de forma minuciosa con lejía la vivienda donde mantuvo una cita con la joven en el pueblo de Manuel, según informó ayer el programa 'Espejo Público' de Antena 3. La Guardia Civil busca intensamente a este individuo tras identificarlo con los datos que la madre de Marta facilitó a los investigadores del Grupo de Homicidios.

Una cita en el pueblo de Manuel con un hombre que había conocido a través de internet y el mensaje con su ubicación que la joven envió a su madre, a través de la aplicación de WhatsApp, antes de entrar en la vivienda del sospechoso son las dos pistas clave de la extraña desaparición de Marta. Como ya informó LAS PROVINCIAS, la madre de la joven acudió a la Guardia Civil después de localizar la casa del hombre que había quedado con su hija, supuestamente, en la madrugada del pasado 7 de noviembre.

Dos días después de la cita que mantuvieron el joven colombiano y Marta, la madre de la mujer desaparecida se desplazó al lugar indicado por el mensaje que había recibido de madrugada, concretamente la calle San Juan Bautista de Manuel, para preguntar a varios vecinos si habían visto a su hija, según explicó la abuela paterna de la joven.

La madre de la joven acudió a Manuel dos días después de la cita de su hija con el sospechoso

La mujer, que estaba angustiada porque Marta no respondía a las llamadas del móvil, llamó incluso a la puerta de la vivienda donde creía que podría estar su hija y mantuvo una corta conversación con el individuo que había alquilado la casa. Marisol Calvo preguntó al sospechoso dónde estaba su hija y mencionó el nombre de la joven, pero el hombre le dijo que no conocía a ninguna mujer que se llamara Marta. Como no pudo localizar en el pueblo a su hija, la mujer acudió poco después a un cuartel de la Guardia Civil, que estaba cerrado, y luego se desplazó a Valencia y presentó la denuncia por desaparición en una comisaría de la Policía Nacional.

Días después, la Guardia Civil realizó batidas en el municipio con perros adiestrados y un helicóptero, e incluso registró la vivienda de la calle San Juan Bautista donde residía el hombre que quedó con Marta. El principal sospechoso de la desaparición es un individuo de tez morena, de unos 35 años de edad, con gafas y barba incipiente. Así lo describen los vecinos que se reúnen cada tarde en el banco de una calle donde todos se conocen.

Tras limpiar la casa de forma minuciosa, el hombre huyó y la Guardia Civil lo busca intensamente desde entonces. Su vehículo lo tenía un amigo, que nada tiene que ver con la desaparición de Marta, y ya ha sido inspeccionado de forma minuciosa por los investigadores. Todo parece indicar que el sospechoso trasladó en su coche a Marta desde Valencia a Manuel, ya que la joven no tiene carné de conducir.

La Guardia Civil también registró la casa donde residía el joven colombiano, según el precinto policial colocado en la puerta con fecha del 15 de noviembre. El dueño de la vivienda, Cristian, en declaraciones al programa 'Ya es mediodía' de Telecinco, explicó que Marisol, la madre de Marta, el día que acudió al domicilio que le indicaba la ubicación enviada por su hija, también se puso en contacto con él para saber más sobre su inquilino, después de que el sospechoso le negara conocer a su hija. Cristian llamó entonces al joven colombiano y le sugirió que fuese a declarar ante la Guardia Civil si era cierto que no había visto a Marta, pero el individuo no lo hizo y huyó.

Aunque el tranquilo pueblo de Manuel ha sido el escenario de un suceso cuyos protagonistas no tienen amigos ni familiares en esta localidad, los vecinos siguen preguntándose qué pudo pasar ese día y, sobre todo, tratan de recordar cuándo y dónde pudieron encontrarse con este sospechoso para ayudar a la Guardia Civil en sus investigaciones. Un grupo de agentes de la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) y el Equipo Central de Inspecciones Oculares (ECIO) del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil se desplazaron a Valencia para apoyar al Grupo de Homicidios de la Comandancia de Valencia.

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