Liberados 21 orientales víctimas de trata de seres humanos en una operación con 24 detenidos

La investigación se inició tras el hallazgo de una nave industrial en la localidad de Chiva (Valencia), en cuyo interior existía una plantación 'indoor' de marihuana de grandes dimensiones, procediendo a la detención de cinco personas, todas ellas de nacionalidad china.

Cuatro de estos detenidos, que carecían de cualquier tipo de documentación, residían las veinticuatro horas del día en el interior de la nave en condiciones muy precarias, desconociendo totalmente el idioma español y que habían sido captados en su país de origen, mediante la falsa promesa de un trabajo digno en Europa, siendo posteriormente trasladados a España, con escala en varios países. A todas estas víctimas halladas en el interior de la nave, les había sido retirada su documentación por los integrantes de esta organización, a la vez que sus captores les prohibían salir, facilitándoles periódicamente alimento y algunos enseres de higiene.

Los investigadores descubrieron que estas personas eran víctimas de trata de seres humanos para su explotación con el fin de realizar actividades delictivas. Por este motivo se pusieron en marcha las operaciones 'Quincunce' y 'V-Termal'. De esta manera fueron identificados distintos grupos criminales con el mismo 'modus operandi', relacionados entre sí y liderados por personas de nacionalidad China que se dedicabana la explotación de personas para realizar cultivos 'indoor' de marihuana.

La Guardia Civil procedió así al desmantelamiento de ocho naves industriales, en Valencia, Zamora, Orense, Jaén y Guadalajara, donde fueron liberadas víctimas que se encontraban en condiciones de esclavitud. En la operación, fueron incautadas más de 17.000 plantas demarihuana con un peso total de 1.831 kilos manufacturados listos para su envío al extranjero, procediéndose a la liberación de 21 personas, de nacionalidades china y vietnamita.

En el pasado mes de marzo, se procedió asimismo a la detención de los considerados como líderes de la organización en la Comunidad de Madrid, ambos de nacionalidad china, los cuales mantenían el control de la parte económica y la operativa de las diferentes naves. Según la Guardia Civil, uno de ellos es un conocido empresario titular de varios bazares de venta de artículos chinos, que a su vez también actuaba en la regularización de compatriotas suyos en Europa.

A los 24 detenidos se les imputan los presuntos delitos de trata de seres humanos, contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y defraudación de fluido eléctrico.