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El capitán del buque mercante 'City of Plymouth'. LP
La jueza ordena buscar la foto de Anglés e interrogar por tercera vez al capitán del barco en el que huyó

La jueza ordena buscar la foto de Anglés e interrogar por tercera vez al capitán del barco en el que huyó

La magistrada inicia una nueva diligencia de investigación para tratar de averiguar más datos sobre la fuga y el posible paradero del asesino de las niñas de Alcàsser

Javier Martínez

Valencia

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Miércoles, 3 de marzo 2021

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La jueza de Alzira que recibió el traspaso del caso Alcàsser ha ordenado buscar una fotografía de Antonio Anglés, tal y como solicitó la Asociación Clara Campoamor, tras reactivar la investigación sobre la fuga del presunto asesino de las niñas de Alcàsser.

La magistrada ha dictado una providencia para pedir a la Policía de Reino Unido que vuelva a tomar declaración al capitán y al primer oficial del 'City of Plymouth', el barco donde se pierde la pista de Anglés, para que expliquen qué hicieron con la instantánea. El objeto de esta diligencia de investigación es localizar la foto que un marinero realizó al fugitivo durante la travesía por aguas del Atlántico en 1993, según la declaración de un miembro de la tripulación.

La posible existencia de esta fotografía fue desvelada hace unos meses por Gerard Kevin McBride, oficial jefe del buque, cuando la Policía inglesa volvió a interrogarlo tras una comisión rogatoria internacional, una petición de auxilio internacional que realizó la jueza Elisa Fort.

Según McBride, la imagen de Anglés fue tomada días antes de que el barco atracara en el puerto de Dublín. El oficial jefe creía que el intruso que encerraron en un camarote era un polizón cualquiera, y por este motivo, no habría contado nada sobre aquella foto cuando un agente le tomó declaración en Liverpool en 1993.

Como la Guardia Civil, la Policía y la jueza desconocían la existencia de la fotografía, la -, que ejerce la acusación popular en el caso Alcàsser, solicitó la práctica de nuevas diligencias para la localización de la misteriosa foto, pero la magistrada inadmitió la petición al considerar que no aportaría ningún dato esclarecedor, cualquiera que fuera el resultado, "sobre el paradero del presunto autor de los hechos", señaló la magistrada como argumento para rechazar la solicitud.

Sin embargo, la acusación popular presentó un recurso de reforma, que fue estimado hace unos días por la Sección Tercera de la Audiencia de Valencia, y ahora la jueza ha dictado una nueva providencia para que la Policía inglesa tome declaración, por tercera vez desde 1993, a Kenneth Farquharson Stevens y Stephen Richard, el capitán y primer oficial del buque, respectivamente.

La Unidad de Cooperación Judicial de la Autoridad Central del Gobierno británico deberá informará de sus pesquisas a la jueza de Alzira y al Grupo de Localización de Fugitivos Internacionales de la Policía Nacional, ya que los investigadores revisan el caso cada cierto tiempo para buscar pistas sobre el paradero de Anglés.

Ficha policial de Antonio Anglés.
Ficha policial de Antonio Anglés. LP

Además de intentar localizar la foto, la Asociación Clara Campoamor pretende obtener nuevos datos del fugitivo en el caso de que esté vivo y no hubiera muerto ahogado en el océano Atlántico. La extraña desaparición de Anglés en el 'City of Plymouth', desguazado hace años, vuelve a ser actualidad tras afirmar el capitán del buque (en una entrevista emitida en enero de 2018 en el programa 'Equipo Investigación' de La Sexta) que un miembro de la tripulación había ayudado al prófugo a escapar.

La Policía británica ha tomado ya declaración dos veces al capitán del barco y los miembros de la tripulación. Los primeros interrogatorios tuvieron lugar poco después de que el buque atracara en Liverpool para averiguar cómo había logrado escapar Anglés, pero entonces sus manifestaciones no arrojaron luz sobre los grandes interrogantes que planean de la fuga.

Stevens advirtió al prófugo de las pocas posibilidades que tenía de sobrevivir si intentaba llegar a nado a la costa, porque el agua estaba muy fría. Cuando el buque atracó dos días después en Dublín, dos policías irlandeses subieron a bordo y descubrieron que Anglés ya no estaba encerrado en el camarote. Alguien le había ayudado a escapar. La tripulación comprobó que faltaba una cuerda y un chaleco salvavidas, que fue encontrado a la mañana siguiente en la bahía de Dublín, por lo que la Policía y los marineros dedujeron que el fugitivo logró alcanzar la costa.

Tras registrar el mercante y no encontrar al polizón, zarparon rumbo a Liverpool, donde la Policía inglesa rodeó el puerto y realizó otro registro con perros adiestrados. Era el 27 de marzo de 1993. Vivo o muerto, Anglés había eludido otra vez un cerco policial.

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