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Traslado. Los sanitarios suben en una ambulancia a una de las mujeres afectadas por el incendio.

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Traslado. Los sanitarios suben en una ambulancia a una de las mujeres afectadas por el incendio. José Jordán / AFP

Tragedia en Moncada: «Hubo que hacer una cadena humana para sacar a los residentes»

Cerca de 80 efectivos participaron en el rescate de los usuarios de la primera planta de la residencia, la mayoría grandes dependientes Martín Pérez Concejal de Seguridad Ciudadana y coordinador de Protección Civil

A. DASÍ/J. A. MARRAHÍ

Jueves, 20 de enero 2022, 00:29

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«Tuvimos que actuar rápidamente haciendo una cadena humana para sacar a los residentes encamados». Así explicó el concejal de Seguridad Ciudadana de Moncada, Martín Pérez, cómo fue el rescate de los residentes en el trágico incendio que se cobró la vida de seis de ellos. Todavía con la cara ennegrecida y sin dormir, el edil, que también es el coordinador de Protección Civil, efectuaba estas declaraciones este miércoles sobre el suceso que vivió en primera persona. Él, junto con su mujer, la alcaldesa, Amparo Orts, fueron de los primeros en llegar al lugar de los hechos y viendo cómo estaba la situación dejaron a su hijo durmiendo en el coche mientras colaboraban en todo lo posible.

«En diez o quince minutos nos juntamos cerca de 80 efectivos de Moncada y de agrupaciones de otras localidades cercanas», relató. «Había mucho humo que no nos dejaba ver y se colaba por debajo de las puertas de las habitaciones», siguió. Fue entonces, una vez valorada la situación y sabiendo que la mayoría de las habitaciones estaban ocupadas por personas grandes dependientes y con escasa o nula movilidad, cuando decidieron hacer una cadena con los efectivos de Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil, encabezada por los bomberos, para ir sacando a los ancianos desde la primera habitación del pasillo hasta la última, afectada por las llamas y que estaba junto a la escalera de incendios, lo que dificultó el rescate.

«Aquí tengo amigos y conocidos, pero como no se puede pasar ni tengo contacto de familiares no hay manera de saber si están vivos o muertos»

José Cuevas | Jubilado de Moncada

Intubaciones in situ

Poco a poco fueron llevándolas hasta las escaleras del piso, algunos en sus camas, y los fueron bajando con sillas hasta el hall de las instalaciones de la residencia. Allí, los servicios de emergencias hacían el triaje de los que estaban más graves y el resto eran trasladados al comedor, una de las estancias seguras en esos tensos momentos en los que primaba salvar a los residentes que se encontraban en la zona del incendio. Según narró el edil, «algunos de los heridos tuvieron que ser intubados allí mismo».

En la primera planta hay 12 habitaciones y la mayoría estaban ocupadas por dos personas. Gracias a esta cadena humana consiguieron rescatar a 38 residentes, según narró el concejal. «En todo momento se preguntó por los listados de las personas encamadas con el objetivo de ir comprobando que no dejábamos a nadie en el interior», apuntó, y añadió que por ello, «sabíamos que faltaban dos residentes». Tras las revisión posterior, se comprobó que estaban en la habitación donde se originó el incendio y fueron los primeros en fallecer.

«Me he enterado por la tele esta mañana. La residencia no nos avisó. Mi madre ha sobrevivido, pero he pasado un rato que no deseo a nadie»

Mónica Romero | Hija de residente a salvo

Entre el operativo que participó en el rescate también hubo bajas. Resultaron heridos cuatro policías locales, cuatro guardias civiles y tres voluntarios de protección civil por inhalación de humo. Algunos de ellos recibieron oxígeno en el lugar de los hechos, mientras que otros fueron trasladados al hospital para comprobar el estado de los pulmones aunque recibieron el alta al poco tiempo. También resultó herida una auxiliar de la residencia que estaba de guardia y que fue la que dio la voz de alerta.

Vídeo.

Jesús María Sánchez | Portavoz de la Guardia Civil

«La visibilidad era nula pero los guardias sólo pensaban en salvar»

Tres guardias civiles se intoxicaron en su esfuerzo por proteger a los ancianos. «La visibilidad era nula» a causa de la humareda «pero en una situación así los guardias no pensaban en su integridad, sólo en salvar vidas». Así lo destacó este miércoles Jesús María Sánchez, portavoz de la Guardia Civil en la Comandancia de Valencia. La evacuación «fue complicada» y todos los servicios de emergencia «hemos demostrado la esencia del ser humano: no pensar en nosotros, sino en la persona que está en peligro». Los agentes seguíaneste miércoles recuperándose.

Beatriz Serrano | Profesora IES Tierno Galván

«Es algo que no te crees, un shock para nuestro instituto»

Más de un millar de alumnos y profesores del colegio público Blasco Ibáñez y el IES Tierno Galván se vieron sacudidos por la tragedia. Ambos centros educativos lindan con la residencia incendiada. «Es algo que no te crees, un shock para nuestro instituto», lamentó la profesora Beatriz Serrano. «El vínculo con la residencia es muy grande porque docentes del instituto preparamos actividades y talleres ocupacionales para los mayores», destacó. En ambos centros, los menores tuvieron que encajar la tragedia a pocos metros de sus pupitres. Honraron a las víctimas con silencio y, luego, un sonoro aplauso.

Familiares de una residente del centro

«Tuve la sensación de que mi hermana se había salvado»

Recibió la llamada una vez sofocado el incendio. El hombre, de unos ochenta años, no conoció la situación hasta las siete de la mañana del este miércoles. El teléfono sonó. Una voz por el auricular le comunicó que su hermana se encontraba entre los heridos del incendio de la residencia de Moncada. No supo a ciencia cierta en qué estado se encontraba hasta que se dirigió al hospital Arnau de Vilanova, en Valencia, lugar en el que la interna del centro se encontraba hospitalizada. Le acompañaba su hija, de unos cincuenta años. «Seguramente no avisaron a mi padre de madrugada porque está delicado de salud», aseguraba. Lejos de dejarse llevar por el pánico, el hombre confió en su instinto. «Tuve la intuición de que mi hermana se había salvado», confesaba tranquilo. Afortunadamente, el octogenario estaba en lo cierto. Sólo cuatro horas después de conocer la noticia, el hombre esperaba en la puerta del hospital a que le dieran el alta a su hermana. «Dentro de unos instantes la ambulancia la llevará de vuelta a la residencia», indicaba visiblemente aliviado.

José Miguel Basset | Jefe de Bomberos

«Podría haber sido una tragedia de dimensiones extremas»

José Miguel Basset, de 61 años, es inspector jefe del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia. Lleva desde los 23 en bomberos y, una vez más, tuvo que enfrentarse el martes junto a los suyos a un incendio mortal en una residencia valenciana.Su conclusión tras lo vivido es sencilla y contundente: «Esto podría haber sido una tragedia bárbara, de dimensiones extremas». Además del crucial esfuerzo de los equipos de emergencia, cree que no hay que lamentar más muertes «por los sistemas de sectorización ante incendios», los diseños arquitectónicos y puertas capaces de contener estos siniestros.A su llegada se encontraron con un fuego «rápido, en fase avanzada, a toda su potencia de calor», con el foco en una habitación del primer piso, al fondo del ala derecha. «Fue emocionalmente muy angustioso, con gente atrapada que pedía auxilio», revive.La estrategia de los bomberos fue «penetrar con mangueras extinguiendo y sacando a los pasillos a las personas en apuros». Una vez allí, «equipos de emergencia los trasladaban hacia fuera, en brazos, empujando camas, en sillas de ruedas...». La humareda, «llegaba a las rodillas y fue ascendiendo». La tragedia se confirmó después: «En la habitación de origen había dos personas calcinadas. Otras tres murieron en estancias próximas».

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