El crimen de la peluquera de Tavernes de Valldigna cumple una década sin resolver
El entorno de la víctima exige justicia y que se reabra el caso, que quedó archivado en 2008, «para ver de una vez al asesino entre rejas»
CARLES GIMENO
Lunes, 9 de febrero 2015, 23:28
Una década sin justicia. Se han cumplido diez años del brutal asesinato de la peluquera de Tavernes de la Valldigna Pilar Ramírez sin que se haya encontrado al culpable. El 2 de febrero de 2005 alguien arrebató de forma violenta la vida de esta joven que este mes habría cumplido 43 años. Salió a caminar por el paraje del Clot de la Font y cuando sólo le quedaban unos cien metros de llegar al casco urbano fue asesinada en un campo de naranjos.
La golpearon con un canto en la cabeza hasta causarle la muerte. Tras una década los vecinos de Tavernes aún se estremecen por los hechos y en la memoria colectiva se combinan varios sentimientos: la rabia, porque no se haya detenido al culpable; el miedo, porque temen que su agresor siga en el municipio; y la compasión por un suceso que sacudió a toda la población.
Desde el fatídico día del asesinato los vecinos son más cautos a la hora de pasear por las zonas rurales del término municipal de Tavernes. Especialmente las mujeres tratan de evitar ir solas. El miedo, pese a los años, aún no ha desaparecido en la localidad.
Pilar tenía 32 años, estaba casada y tenía un hijo. Se había instalado a vivir en Tavernes de la Valldigna, ya que ella era originaria de Madrid. Era aficionada a caminar sola o con amigas por la Vall y sus alrededores. Una tarde, fue sola y sucedió lo peor.
Su cuerpo fue encontrado por unos niños que merodeaban por la zona y avisaron a otros vecinos. No se pudo salvar su vida. Comenzaba una investigación que con el tiempo se ha visto que tenía muchos interrogantes sin resolver.
Los cuerpos de seguridad detuvieron a C. Sánchez, vecino y amigo de la víctima, pero las pruebas del ADN encontrado en la víctima fueron negativas y quedó en libertad.
El asesino sigue libre. LAS PROVINCIAS ha sabido que la Policía Judicial, pese a que el caso se archivó en 2008, ha seguido haciendo pesquisas con el fin de averiguar quién arrebató la vida a esta joven. Aún no han encontrado nada concluyente y, tras una década, los vecinos de Tavernes ven difícil que se detenga al culpable.
Amigas de la fallecida han expresado estos días a LAS PROVINCIAS su indignación. Todas coinciden en que no puede ser que este asesinato no se resuelva. «Hay que hacer justicia. No se entiende que una persona mate a otra en plena tarde, a unos metros de Tavernes, y que no se localice al asesino. Pedimos justicia, que se reabra el caso, porque queremos descansar viendo al asesino entre rejas».
Aclarar el asesinato daría una obvia tranquilidad al municipio de Tavernes, así como a los amigos y familiares de Pilar que piden que se resuelva el horrible crimen.
La investigación tenía muchas hipótesis abiertas. Se hablaba de una persona que merodeaba en la zona donde fue asesinada Pilar. Se comentaba la presencia de un vehículo en el lugar de los hechos. Pero nada ha sido determinante y el caso sigue sin resolver. La sociedad de la Valldigna, ya que el marido de Pilar era de Benifairó, se volcó en el caso con un clamor pidiendo justicia. Se sucedieron los actos de repulsa a este asesinato y se recordaba la memoria de Pilar.
Desde hace años que eso ya no sucede, pero que no se den actos no significa que este trágico suceso haya caído en el olvido. En Tavernes aún hay miedo, aún se pide justicia.
Los vecinos creen que este caso no se resolverá. Las investigaciones siguen, la policía judicial no abandona el caso, pero el paso del tiempo genera escepticismo con la posibilidad de que se llegue a dar con el asesino.