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Salvador Illa. Foto: Efe | Vídeo: Ep

El Gobierno evalúa un nuevo estado de alarma para aplicar el toque de queda

El ministro Illa reclama concreción al PP sobre su apoyo a reforzar las restricciones de movilidad tras la petición de la Comunidad de Madrid

Mateo Balín

Madrid

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Martes, 20 de octubre 2020, 10:02

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El Gobierno no ve con malos ojos la aplicación del toque de queda para prohibir la libre circulación de personas durante una franja horaria nocturna. La sugerencia realizada esta mañana por el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, de pedir nuevas restricciones de movilidad ha sido recogida por el ministro del ramo Salvador Illa, que se ha comprometido a estudiar la petición antes de que decaiga el estado de alarma este viernes en la ciudad de Madrid y otras poblaciones de la región.

No obstante, a la espera de que el gobierno de Isabel Díaz Ayuso formalice sus intenciones, el ministro de Sanidad quiso mostrar cautela por la deriva política y legal que conllevaría reforzar el confinamiento nocturno en la región madrileña, epicentro de la transmisión incontrolada del virus.

«El toque de queda necesitaría la cobertura del estado de alarma. Si decidiéramos ir por este camino sería importante saber si el PP está dispuesto a apoyarlo, porque es una medida con un horizonte temporal de más de 15 días», ha señalado Illa en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. «Nosotros no vamos a pedir la prórroga del estado de alarma (en Madrid). El toque de queda es una medida que requiere el estado de alarma y vamos a analizarlo», ha añadido.

La repercusión del anuncio realizado por el consejero madrileño llega antes de que este viernes decaiga el estado de alarma que lleva vigente desde el 9 de octubre. Y sin, de momento, un plan B con el que enfrentarse a la pandemia. La presidenta Díaz Ayuso sopesa rescatar el confinamiento por áreas sanitarias que impuso a finales de septiembre y que no acaba de convencer al Ministerio de Sanidad. Pero sabe que es insufiente. De ahí que el ejecutivo regional esté estudiando ahora si pedir al Gobierno central que decrete el toque de queda, que permitiría que no existiese ningún movimiento en la región en determinadas horas de la noche.

Así lo ha avanzado esta mañana el consejero Ruiz Escudero en un desayuno socio-sanitario, organizado por Europa Press. Esta iniciativa que el presidente francés Emmanuel Macron puso en marcha en París y otras ocho grandes ciudades francesas para tratar de frenar el avance de la pandemia la pusieron sobre la mesa los colegios profesionales en una reunión este lunes con el propio consejero y la presidenta Díaz Ayuso.

«Para eso hay que tener una cobertura legal que no tiene la comunidad autónoma. Tendría que ser una decisión del Gobierno de España. Es una decisión que nosotros tampoco veríamos mal», ha asegurado. Para Escudero, «cualquier decisión» que se vaya a tomar con respecto a restricción de movilidad o a actividad hay que estudiarla. Así, ha desvelado que lo han hablado a «nivel interno» pero todavía no con sus homólogos de otras autonomías.

Junto a Madrid también Cataluña está estudiando prohibir salir por la noche. Sería una forma de ir un paso más allá al cierre nocturno a partir de las once de la noche. La medida de momento se aplica en algunas localidades de Francia y también en Bélgica y Eslovenia, que lo implantaron este mismo lunes ante el avance descontrolado de la pandemia. Los gobiernos europeos tratan por todos los medios de evitar un confinamiento generalizado como en primavera. El Ejecutivo de Pedro Sánchez, de momento, no da ningún paso al frente, se limita a recordar que ya ofreció en agosto la posibilidad de estados de alarma a la carta.

Este jueves, finalmente, las comunidades autónomas se reunirán, de nuevo, con el Ministerio de Sanidad. Se espera que de dicho encuentro salga algún tipo de indicación común para hacer frente a la covid-19. El borrador presentado la semana pasada, con peldaños, podría dejar de serlo para convertirse en norma. De ser así, todas las comunidades autónomas están en situación comprometida. A ello podría añadirse el toque de queda, o al menos abrir el debate sobre su aplicación. En París el toque de queda, la prohibición de salir a la calle para realizar cualquier actividad no autorizada, va desde las nueve de la noche hasta las seis de la mañana.

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