El norte de Italia comienza a aislarse por el brote de coronavirus que, desde este fin de semana, ha disparado el número de afectados. Al menos seis personas han fallecido y más de 200 se han contagiado por la rápida expansión del virus. Los supermercados han sido completamente vaciados y están prácticamente agotados los jabones desinfectantes y las mascarillas. El temor a que la difusión sea mayor ha llevado a las regiones de Piamonte, Lombardía y Véneto a la suspensión de fiestas, eventos, como el carnaval de Venecia, manifestaciones culturales y deportivas. Además, se han cerrado museos, escuelas y universidades.
EFE
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