Bethlehem y la fuente de la riqueza

Etiopía era sinónimo de hambruna y de pastores escuálidos vagando con ganados esqueléticos. George Michael, Sting y Bob Geldof y la mitad del pop inglés llegaron a preguntarse, en una canción mítica de los años ochenta, si ellos, los habitantes del país depauperado, conocían la Navidad. Fue entonces, al principio de aquella década de violencia y carencias, cuando nació Bethlehem Tilahun Alemu, hoy una joven empresaria empeñada en convertir las imágenes de miseria que rodean su tierra en otras de progreso. Su herramienta se llama soleRebels, la primera franquicia internacional con sello abisinio.

La aparición de ambiciosas mujeres de negocios en África no resulta un fenómeno novedoso. Algunas han medrado en los ámbitos del petróleo, los recursos naturales y la construcción, a menudo alentadas, y posiblemente financiadas, por padres gobernantes de larga duración. El caso de Tilahun es más modesto ya que no proviene de la élite dirigente nativa y, sin embargo, su prestigio actual resulta extraordinario. Ella, literalmente, tan sólo puso un pie en el mercado, pero supo calzarlo adecuadamente. En 2004, con un capital de 9.500 euros, puso en marcha una firma dedicada a la fabricación de zapatos en Zenebework, un suburbio de la capital Addis Abeba.

La iniciativa pretendía aunar la tradición indígena y el diseño occidental. La sandalia local, conocida como selate o barabasso, utiliza materiales naturales y reciclados y la nueva empresa comenzó a confeccionar un producto que combinaba el uso de cuero de animales de corral y telas hechas a mano con la inclusión de tiras de neumático y vivos colores. El nombre de la compañía homenajea a los rebeldes que hicieron frente a la invasión italiana del Imperio del Negus.

El empeño de salir adelante contaba, además, con nuevo reto, ya que la promotora se comprometió con las normas del comercio justo, que reclaman salarios dignos, empleo de recursos sostenibles y preservación del medio ambiente. Actualmente, soleRebels es la firma de su sector de mayor crecimiento en todo el continente y la única que mantiene su fidelidad acreditada a esos principios de la economía solidaria.

Las botas, mocasines y marroquinería de lujo, bajo la marca Republic of Leather, ya proporcionan trabajo regular a más de 400 artesanos y se exportan a Estados Unidos, Italia, Taiwán, Australia y España, donde comenzaron a comercializarse el pasado año a través de una tienda en Barcelona. El encanto 'ecofriendly' y su sencilla modernidad han conquistado al público 'hipster'. Bethlehem estimaba que los ingresos en el último ejercicio rondaban los 9,5 millones de euros.

Hace dos meses habló ante la Asamblea General de la ONU en una intervención en la que exigió menos caridad y más créditos blandos y oportunidades para la gente sin medios. También explicaba su interés por proseguir su aventura empresarial introduciéndose en nuevos jardines, en este caso de intenso aroma. 'Garden of Coffee' se ha convertido en la última propuesta de la joven 'manager', una línea de venta de café tostado artesanalmente en Etiopía, cuna de la bebida. El éxito también ha acompañado la diversificación del negocio: «Estoy superorgullosa de informarte que, el pasado mes, nos convertimos en la primera empresa etíope que ha admitido la Asociación Americana del Café Tostado», confesaba en una entrevista con este periódico.