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El conseller Soler, junto con la directora de la Agencia Tributaria (a su izquierda), y cargos de Hacienda. :: L P
Hacienda gasta 7.400 euros en la compra de 40 sillas

Hacienda gasta 7.400 euros en la compra de 40 sillas

El organismo cumple su primer año con una compra de mobiliario para habilitar los despachos de sus oficinas

m. h.

Lunes, 27 de enero 2020, 20:04

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La Agencia Tributaria Valenciana (ATV) cumple su primer año de vida después de que el Consell aprobara el pasado mes de febrero su puesta en marcha para tratar de avanzar en la autonomía financiera de la Generalitat a través de la recaudación de los impuestos propios. Sin embargo, parece que la treintena personas que componen el nuevo organismo no tenían dónde sentarse, a juzgar por la compra de materia de oficina que la ATV realizó hace unos meses y que ahora se ha hecho pública. Se trata de 44 sillas para las que la Hacienda valenciana ha desembolsado 7.400 euros. A casi 170 euros el asiento.

La Agencia echó mano para poder comprar sus sillas de un contrato menor, al no exceder el tope legal que marca la ley de contratos del sector público, que fija en 15.000 euros el máximo que se puede adjudicar de manera directa. Es decir, a dedo. La Hacienda valenciana cuenta así con 44 nuevas sillas para su nueva sede, en la calle Gregoria Gea.

Pero, los asientos de la Agencia Tributaria no han sido los más caros hasta la fecha para un organismo público. La radiotelevisión pública À Punt inició el pasado verano un concurso en el que estaba dispuesta a pagar hasta 8.000 euros por 15 sillas de oficina para dar servicio a la redacción de informativos. La televisión valenciana piensa gastar un máximo de 533 euros –IVA excluido– por cada una de las unidades. En el pliego de prescripciones técnicas se exige que por «coherencia estética» las sillas deben de ser iguales a las que hay actualmente en el centro de producción de Burjassot. Un dato que atendía a los criterios de «modernidad e imagen» para que el mobiliario sea idéntico en tamaño, color y forma a los ya existentes. Para elegir la mejor oferta, se tuvieron en cuenta las tipologías anatómicas de los trabajadores que las iban a a utilizar. Por eso, los elementos de cada silla tenían que ser adaptables y fáciles de sustituir. Además, por motivos medioambientales la silla tenía que ser ligera y se debe poder desmontar de manera rápida con herramientas comunes para su reciclaje. La garantía de cada pieza debía de ser de un mínimo de dos años.

Pero hay más casos recientes en la Administración en los que se ha necesitado comprar nuevo mobiliario. En el Palau de Pineda, sede de la Vicepresidencia segunda que ostenta Rubén Martínez Dalmau se licitó recientemente la compra de muebles de oficina para acondicionar el espacio.

En ese caso, la 'silla de dirección' se valoraba en 500 euros. Mientras que las del resto de despachos eran más económicas. Se pedían el 'sillón confidente' , que es una de los asientos más solicitados para las visitas y reuniones. En el caso de los despachos de dirección, con un precio de entre 75 y 120 euros cada una. Para los espacios colectivos, de 50 euros, precios inferiores a los de la Agencia Tributaria.

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