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La encargada de la F-1 admite que Ecclestone impuso a su mano derecha para el circuito

La encargada de la F-1 admite que Ecclestone impuso a su mano derecha para el circuito

Belén Reyero confiesa que el magnate británico quiso que el ingeniero Tilke estuviera implicado en el proyecto de Valencia

A. RALLO

VALENCIA.

Domingo, 13 de mayo 2018

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El nexo de la Administración valenciana con la F-1 se ha convertido también en pieza clave en la investigación de la Fiscalía Anticorrupción. El avance de las instrucciones, tanto la del caso Valmor como la del amaño del circuito, han elevado el grado de participación de la asesora Belén Reyero en esta supuesta trama. Además, el método de trabajo de la que fuera alto cargo de la Sociedad Proyectos Temáticos ha deparado enormes ventajas a los profesionales de la UDEF. Ella elaboraba unas fichas con todos los avances del proceso y el contenido de las reuniones que celebraba. De hecho, esas anotaciones se las entregaba a Francisco Camps cuando acudían a algún acto, siempre según su declaración en el juzgado.

Reyero ha reconocido en el marco de esta investigación judicial que fue Ecclestone quien impuso a las dos ingenierías la participación en el proyecto de la empresa del ingeniero alemán Herman Tilke. Este profesional ha participado en todos los nuevos circuitos de la últimas décadas. Las dos empresas que concurrieron en Valencia iban de la mano de este ingeniero. La declaración de la investigada ha permitido conocer que fue un requisito de Ecclestone que esa firma estuviera implicada.

La responsable del Consell en la negociación de la F-1 está colaborando con la Justicia. Desde el mismo momento de su detención, ya indicó a los agentes que en su domicilio no guardaba documentación de la F-1, pero sí en su empresa. Reyero se salió de la administración y empezó a trabajar en una sociedad que casualmente recibió adjudicaciones de la Volvo Ocean Race por un servicio que antes se hacía desde su departamento.

Reyero no ha negado las cinco reuniones en la que participó con las dos ingenierías (Typsa y Ayesa) antes de que finalmente resultaron adjudicatarias de contratos por más de siete millones de euros. No recuerda si alguien de la empresa del arquitecto alemán estaba en esos encuentros. No obstante, la declarante sí insisten en que recibía instrucciones de Ecclestone a través de Presidencia. Y ella las trasladaba a las empresas para que incluyeran estos requisitos.

Las ingenierías empezaron a trabajar en el proyecto de la F-1 muchos meses antes de que se les adjudicara oficialmente el encargo. Uno de los propios trabajadores, tras una polémica con su empresa que terminó en un despido, acudió a la Fiscalía Anticorrupción a denunciar estos hechos. Hoy es un testigo principal en la causa judicial.

Además, Reyero fue precisa al concretar el impulso original del desembarco del Gran Circo en Valencia. Las reuniones iniciales se celebraron en el despacho del expresidente Camps con él y casi desde el principio también con el número 2 de la Conselleria de Infraestructuras, Victoriano Sánchez Barcaiztegui, según su testimonio. Este último es una persona del círculo de Camps al que el conseller José Ramón García Antón fichó para su departamento. La investigación apunta que este responsable recibió el primer encargo -es ingeniero- para elaborar un posible trazado del circuito que discurría por la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

La investigada no ha dudado en reconocer que era el enlace de Presidencia para la F-1. En este cometido influyó que Reyero domina el inglés. En su declaración en la causa del circuito ha sido muy clara en ese sentido. La instrucción general que le dio el expresidente fue «que se enterara de todo». Camps, en su última comparecencia judicial por el caso Valmor, quiso desligarse de la negociación -con Ecclestone era todo protocolo- y también de Reyero a quien nunca ordenó que siguiera la F-1.

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