Borrar
Ximo Puig, en un acto organizado por Escola Valenciana en Ondara. Tino Calvo
Las ayudas al catalanismo no cesan

Las ayudas al catalanismo no cesan

La izquierda mantiene su plan de inyectar fondos públicos a estas entidades | Durante la última semana han trascendido subvenciones del Ayuntamiento por valor de más de 60.000 euros

JC. Ferriol Moya

Valencia

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Sábado, 9 de noviembre 2019, 18:25

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El vuelco electoral que supuso en 2015 la llegada de la izquierda al Gobierno de la Generalitat, la Diputación de Valencia y algunos de los principales ayuntamientos de la Comunitat permitió dar oxígeno financiero a las principales entidades catalanistas. Las subvenciones y ayudas directas concedidas al entramado de sociedades vinculadas al polémico editor Eliseu Climent así como a otras entidades se ha multiplicado de forma exponencial. Escola Valenciana, Ca Revolta y Societat Coral El Micalet son otras de las entidades que se han visto beneficiadas por el respaldo financiero desde algunas instituciones públicas valencianas.

Durante la última semana se han conocido nuevas ayudas, en este caso del Ayuntamiento de Valencia, a algunas de estas entidades. En los presupuestos municipales para 2020 figuran subvenciones directas tanto a Escola Valenciana como a la Societat Coral El Micalet. 20.000 euros para cada una de esas dos entidades. Sólo unos días antes, el portavoz de Cs en el consistorio, Fernando Giner, denunciaba un conjunto de ayudas que superaba los 20.000 euros, también dirigidas a distintas entidades de perfil catalanista.

El Ayuntamiento que dirige Joan Ribó es excepción, porque tanto la Generalitat como la Diputación de Valencia, y otros consistorios han procurado alejar de la cita electoral de mañana domingo la concesión de ayudas al catalanismo. La corporación provincial de Valencia, por ejemplo, repartió a principios del mes de octubre un total de 300.000 euros a estas entidades. ACPV recibió 61.559 euros, mientras que el Centro de Recursos Just Ramírez (Ca Revolta) recibe 64.538 euros, la asociación Tirant Lo Blanc un total de 35.744 euros, la entidad cultural La Valldigna 52.127 euros y la Fundació Escola Valenciana 94.325 euros. Desde aquella fecha, la corporación no ha vuelto a conceder ayudas a estas entidades.

Debate en la Diputación

Eso sí. Cs presentó hace pocas semanas una moción para su debate en el pleno, dirigida precisamente a cerrar la puerta a que la corporación provincial siguiera financiando a este tipo de entidades. El debate encontró el voto en contra de los partidos de izquierda -PSPV, Compromís y La Vall-.

Rocío Gil, portavoz del partido naranja en la institución provincial y defensora de la propuesta que sí apoyaron PP y Vox, aseguró que entidades como ACPV, Escola Valenciana o Ca Revolta iban «en contra de la Constitución» y recordó que habían recibido casi un millón de euros en los últimos años por parte de la institución.

La respuesta de los partidos que dirigen la Diputación pasó por defender en todo momento la legalidad de las ayudas concedidas y sostener que cumplían «criterios técnicos de concurrencia competitiva». Un argumento que choca con las reticencias mostradas por la corporación provincial para contar en esas subvenciones con entidades como la RACV o Lo Rat Penat.

La conselleria de Educación de la Generalitat es otra de las instituciones que con mayor reiteración ha aprobado ayudas a este tipo de entidades. Por las de promoción del valenciano, igual que por las 'trobades' que organiza Escola, la entidad que dirige Vicent Marzà ha regado con decenas de miles de euros a estas entidades. Y eso que Marzà ha procurado suavizar su perfil desde que llegó a la conselleria.

Climent en el Palau

La vinculación de la izquierda con estas entidades en general, y con Eliseu Climent en particular, tuvo uno de sus episodios principales con la visita que el editor valenciano hizo hace pocas fechas al Palau de la Generalitat. Climent fue 'cazado' por un fotógrafo de ABC a las puertas del despacho de uno de los altos cargos del Palau de la Generalitat. Desde el Gobierno se explicó que Climent había pasado a saludar al director general de Administración Local, el socialista Toni Such, con el que se dijo que mantenía una estrecha amistad. En el momento de tomarse esa imagen, el jefe del Consell, Ximo Puig, mantenía una reunión con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en plena crisis por la angustia financiera del Gobierno valenciano.

El aval financiero de las principales administraciones públicas valencianas hacia estas entidades resulta más llamativo si cabe dada la situación política en Cataluña. Puig, también se ha visto presionado por los partidos de la oposición en los debates en Les Corts en relación con estas ayudas. La portavoz del PP, Isabel Bonig, llegó a reprochar a Puig esa visita al Palau de Climent, así como que desde la década de los 80 el conglomerado de entidades del editor hubiera recibido más de 30 millones de euros de ayudas públicas de la Generalitat de Cataluña -incluida la subvención que le permite hacer frente al pago de su sede-. Puig, con la cita electoral a la vuelta de la esquina y con el soberanismo catalán incendiando contenedores en las callas de Cataluña, ha procurado marcar distancias con el independentismo, y hasta emplazó al presidente catalán Quim Torra a dejar a la Comunitat fuera de sus «ansias soberanistas».

La vinculación de Climent con el independentismo llevó incluso a ACPV a anunciar, tras reunirse hace ahora un año con Torra, una campaña en defensa de los políticos presos.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios