El Consell cede ante los sindicatos y no prorroga a los funcionarios la vida laboral

La consellera de Justicia y Administración Pública, Gabriela Bravo, evitó ayer mantener su primer pulso con los sindicatos UGT, CC OO e Intersindical. Bravo, que sí logró el apoyo para devolver a los funcionarios antes de que acabe el año un 26,6% de la paga extra de 2012 y dejar la mitad restante para el año próximo, optó por anunciar la retirada del decreto de prolongación voluntaria de la vida laboral de los funcionarios ante la advertencia de las mencionadas fuerzas sindicales de no rechazar este asunto en la mesa general celebrada ayer.

A pesar de que CSIF sí daba el visto bueno a la iniciativa anunciada por la consellera, Bravo prefirió no sólo no dejar sobre la mesa que los funcionarios puedan alargar su vida laboral de los 65 a los 70 años, sino que advirtió de que tampoco lo incorporará a la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para 2016 porque prefiere negociar más adelante.

En la primera mesa general, la celebrada el pasado 5 de octubre, UGT, CC OO e Intersindical anunciaron a la consellera que no apoyarían la propuesta. En una conversación informal que mantuvieron altos cargos de UGT con la titular de Justicia el pasado 9 d'Octubre, los del sindicato con vínculos con el PSPV dejaron muy claro a Bravo que rechazaban la medida y que eran partidarios de que se facilitara la incorporación de jóvenes profesionales a la administración pública.

Csif, por su parte, criticó a la consellera por desdecirse de su propuesta del día 5 y olvidarse del decreto de la prolongación de la vida laboral, una iniciativa, según este sindicato, que permitía a los funcionarios reconocerles el derecho a ampliar su trayectoria profesional.

CSIF, además, justificó su falta de apoyo al acuerdo para que los empleados públicos cobren la parte de la paga extra de navidades que se les adeuda desde 2012 «en la discriminación» al sector sanitario. Ese acuerdo llevaba aparejado que los empleados públicos recuperen también los días libres recortados y se llegue a la situación que había en 2011, antes del llamado decreto Vela.

El sindicato independiente insistió en que se incluyera en el acuerdo al personal de Sanidad para que recuperase tanto los llamados «días adicionales» como «los moscosos». Los representantes del Consell incidieron en que ese asunto se trataría en la mesa sectorial de Sanidad aunque después no se comprometieron a devolver esas jornadas de 2015 a los trabajadores de Sanidad.

El resto de empleados públicos podrá tomar los días libres que les adeudan hasta marzo del año próximo y se llegó a proponer que, por motivo de servicio, en Sanidad se propiciase que ese tiempo para tomar días libres atrasados en la actualidad se prolongue hasta 2017. Csif y Fses no lo aprobaron.

La cuestión es que los empleados públicos cobrarán antes de fin de año un 26,6% de aquella paga extra y el restante 50% adeudado, el año próximo.