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Visita a las instalaciones para determinar el trabajo a realizar.
Un brote de legionela obliga a clausurar el polideportivo municipal

Un brote de legionela obliga a clausurar el polideportivo municipal

El equipo de gobierno comprueba que las instalaciones deportivas no han recibido desde el 2003 ningún control para este tipo de plagas

Fernando Amat

Martes, 24 de noviembre 2015, 01:31

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El polideportivo de Granja de Rocamora está precintado y cerrado desde el pasado viernes, fecha en la que se detectó un importante brote de legionela en sus instalaciones. El elevado índice de bacterias hallado ha obligado al equipo gobierno a tomar medidas excepcionales de carácter urgente en coordinación con Salud Pública, después de comprobar, además, que esta infraestructura no había recibido en doce años, desde que los protocolos de seguridad higienico-sanitarios son obligatorios, ningún tratamiento contra este tipo de plaga.

La evidencia del brote se conoció después de acometerse tareas de limpieza y testar el agua que circula por la red de suministro. Desde Sanidad se recomendó que, dadas las elevadas concentraciones de legionela, se cerrasen las instalaciones deportivas, por lo que todos los partidos de las escuelas deportivas municipales se suspendieron durante el pasado fin de semana. El gobierno bipartito espera reabrir el centro deportivo esta tarde con los vestuarios cerrados y solo con dos aseos operativos, sin poner en marcha el sistema de aspersión del campo de fútbol. Cabe recordar que la legionela se contraer al inhalar agua infectada de bacterias, no al ingerir agua contaminada.

Una responsable de Sanidad inspeccionó ayer todo el polideportivo para encontrar las deficiencias del sistema de agua potable y determinar, al mismo tiempo, los trabajos de mantenimiento a realizar. Todos los grifos y mandos de duchas se deben reponer por otros nuevos, así como aplicar un exhaustivo plan de limpieza de todas las conducciones y el riego por aspersión del campo de fútbol. Además existe un depósito de agua que se debe limpiar y adecuar a la normativa ya que carece de salida para purgar el líquido.

Por todo ello se prevé una importante inversión para adecuar las instalaciones de La Palmera a la normativa sanitaria. Los focos se ha encontrado en los vestuarios del pabellón y del campo de fútbol, donde la grifería se encuentra deteriorada pese a que las instalaciones se inauguraron hace solo seis años. Las duchas y los grifos acumulan bacterias que no se pueden eliminar solo con trabajos de limpieza, por lo que se hace obligatorio el cambio de los mandos de los grifos. En los vestuarios del pabellón polideportivo ocurre lo mismo, aunque este espacio se habilitó hace más tiempo.

Por otra parte los calentadores de los vestuarios carecen de termostato, lo que provoca que el agua no tenga una temperatura suficiente con la que poder matar los brotes encontrados. Esta bacteria sobrevive en aguas que están por encima de los veinte grados centígrados. El acumulador del polideportivo de Granja consiste en un depósito de metal cerrado y que se encuentra al aire libre, por lo que es proclive en almacenar estos organismos. La tarea para higienizar este dispositivo es compleja, porque se debe elevar para limpiar el fondo del contenedor y también impulsar cloro dentro con una bomba.

El equipo de gobierno aseguró que en doce años no se ha realizado ningún tratamiento en contra de la legionelosis a pesar de que era obligatorio por Ley. El Consistorio carece de libro de sanidad donde apuntar cualquier incidencia sobre este tipo de brotes o cualquier otro que hubiera habido. De todo ello dio cuenta ayer las delegada de Sanidad junto con los responsables de la empresa Plagalim, encargada de la limpieza y los concejales José Manuel Nadal y Fermín Bernabeu.

Los tratamientos de limpieza van a durar quince días, si bien hasta dentro de un mes no se podrá saber con certeza si se ha erradicado con totalidad la plaga de legionela, puesto que será entonces cuando se realice otro análisis con el que se detecte si las tareas de limpieza han surtido efecto. Hasta ese momento los vestuarios deben permanecen cerrados por seguridad y el campo de césped artificial solo se regará de manera manual.

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