Dos inauguraciones en 15 días

Las piscinas municipales de Granja de Rocamora abrieron ayer tras celebrarse la segunda inauguración en quince días. El nuevo equipo de gobierno ha resuelto varias deficiencias que hacían imposible la apertura al público, pese a que el PP estrenó la reforma dos días antes de dejar la Alcaldía. Aun así, todavía queda por iniciar un segundo proyecto de rehabilitación para optimizar el espacio público y que de esta manera se puedan aprovechar las zonas de esparcimiento aledañas que ahora quedan acordonadas.

El gobierno bipartito ha tenido que volver a acondicionar una obra que los técnicos de la Diputación Provincial dieron por buena. La reforma de los vasos se quedó completa, pero en las zonas anexas la obra quedó inacabada al carecer de césped, de asientos y de sombra. Así las cosas los vecinos solo podían disfrutar del agua de la piscina y de la cantina. La instalación deportiva se quedó reducida a las piscinas, puesto que la restauración dejó más espacio con tierra que con zonas cubiertas de césped.

La actuación que sufragó el órgano provincial dejó inconclusa zonas tan importantes como la pinada, la pérgola de la zona infantil y los bancos de obra que acogían a las familias que pasaban jornadas completas en las instalaciones granjeras. Estas decisiones no se entienden debido a que el espacio de uso se ha reducido de forma considerable.

En este sentido, «hemos tenido que comprar tapetes especiales de césped procedentes de Holanda para plantarlos alrededor de las piscinas, de lo contrario los bañistas podrían llenar el agua de tierra», advierte el concejal de Deportes, Juan José Hurtado.

El Ayuntamiento decretó ayer jornada de puertas abiertas y los niños de las escuelas de verano fueron los primeros en zambullirse en el agua. La zona deportiva ha mejorado en general pero «hay retoques que se deben dar como unos desagües para las duchas o una mejor entrada a la depuradora», comentó el edil. El responsable municipal echó en falta una mejor equipamiento en las duchas puesto que «en pleno Siglo XXI habían puesto los mandos de rosca».

El acto simbólico de reapertura de las piscinas vino acompañado de una gran expectación infantil. Ahora en el Consistorio espera una segunda ayuda para acometer el ajardinamiento de todas las zonas comunes. A pesar de ello, varios operarios terminaban ayer mismo de instalar persianas en la cantina. Este espacio también presentaba varias carencias que se han resuelto horas antes de que abriera el recinto.