Adelgazar alarga la vida

Tengo que decir que las revelaciones del doctor Viña me causaron cierta sorpresa, pues en estos tiempos en los que el ayuno intermitente está tan en boga, acertada o erróneamente, había asumido su práctica como un método para rebajar mi volumen. No era así y, tras escuchar al también profesor, entendí la realidad, porque como la báscula no engaña, cierta frustración se había apoderado de mí. De ahí que siguiera con especial atención la conferencia. Me produjo tal interés, que merece la pena trasladar la reflexión a este gallinero, más aún en estos días que la Pasión de Jesús invita al ayuno y a la abstinencia.

Para confirmar su exposición, informó de un estudio en el que se asignaron al azar 139 pacientes con obesidad a dos grupos. Los dos grupos tenían el mismo régimen diseñado para perder peso, pero en uno siguieron un programa de ayuno intermitente (se les dejaba comer entre las 8 a las 14 horas) y en el otro comían cuando querían.

El estudio demostró que no había diferencia entre los dos grupos en cuanto a reducción de peso, cantidad de grasa y control de los factores de riesgo metabólico. «En un estudio previo de diseño similar pero sólo de 12 semanas de duración se obtuvieron los mismos resultados, donde quedaba claro que el ayuno intermitente no es eficiente ni útil para perder peso. Sencillamente, para conseguir perder peso hay que ingerir menos calorías que las que se consumen diariamente».

Clásicamente, reiteró, se aconsejaba no aumentar el peso, comer sano y hacer ejercicio. También se postulaba que era aconsejable distribuir entre cuatro o cinco comidas a lo largo del día la cantidad de alimentos. Actualmente al mantener el peso, comer sano y hacer ejercicio añadimos la importancia de la restricción calórica y el ayuno intermitente. Por tanto, queda claro que una moderada restricción calórica junto con el ayuno intermitente son dos herramientas que aumentan la calidad de vida, disminuye los factores de riesgo cardio-metabólicos y puede contribuir a alargar la vida de forma saludable, ya que origina un retraso de las enfermedades asociadas al envejecimiento y se asocia a un incremento de la longevidad. ¡A cuidarnos! Así es la vida.