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Jugadores del Levante, celebrando un tanto durante un encuentro de pretemporada. lud

Once soldados sin un sistema fijo

Con la salida de Bardhi aún por concretar, Nafti trabaja en su once titular | El futuro incierto de varias estrellas granotas obliga al técnico a demorar la definición de su estilo de juego y pilares dentro del campo

Javier Solano

Valencia

Viernes, 5 de agosto 2022, 00:35

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A tan solo siete días del arranque de la nueva travesía del Levante en Segunda División, ciertos aspectos quedan aún pendientes de resolver. Tras un verano marcado por la incertidumbre, donde los interrogantes relacionados con el presente mercado de fichajes y el desconocido futuro de varias de las estrellas granotas han protagonizado el mayor de los dolores de cabeza para la entidad de Orriols, el aspecto deportivo es ahora otra de las grandes preocupaciones que ha llegado a la mesa de trabajo del club azulgrana de cara a la campaña 22/23.

El choque disputado ante el Villarreal el pasado miércoles sirvió para ejemplificar el mayor de los problemas que ahora mismo está sufriendo el equipo de Mehdi Nafti dentro del terreno de juego. No hay un estilo de juego definido. La falta de protagonismo de Pepelu en el centro del campo, la incomodidad de Wesley en área rival, cuya consecuencia acaba trasladándose en una casi inexistente influencia en el ataque granota y la ya conocida falta de seguridad y contundencia en defensa fueron un cúmulo de infortunios que expusieron el pasado miércoles las mayores carencias sufridas por el Levante a lo largo de esta pretemporada.

El escenario en el que ahora mismo se encuentra envuelto el equipo de Orriols tiene a Mehdi Nafti entre la espada y la pared. Campaña, De Frutos, Bardhi y Mustafi, a pesar de ser futbolistas cuya aportación para lograr el objetivo del ascenso resultaría más que beneficiosa, apenas han participado de forma activa en la planificación del curso llevada a cabo este verano. Esto, sumado a la espera de una oferta firme por cada uno de ellos, mantiene bloqueado al preparador franco-tunecino, cuya primera necesidad pasa ahora por elegir a los once soldados de la primera unidad levantinista.

En la portería, Cárdenas ha sido el elegido por Nafti. A pesar de la incorporación de Femenías, el guardameta criado en Buñol será el encargado de mejorar los registros goleadores recibidos en contra el curso pasado. En la defensa, tras múltiples pruebas realizadas con cuatro y cinco defensas, todo parece apuntar a que Rubén Vezo, Róber Pier y Álex Muñoz ocuparán el centro de la zaga, mientras Saracchi y Son ejercerán de carrileros. El gran nivel mostrado por ambos laterales, cuya aportación ofensiva ha sido vital en la mayoría de encuentros veraniegos, ha terminando convenciendo al técnico para usar un sistema defensivo de estas características.

En el centro del campo, Pepelu, Melero e Iborra apuntan a ser el centro de operaciones del conjunto de Orriols. La combinación de las cualidades de cada uno de ellos permitirá fijar un tridente de ensueño. En la zona de ataque y con la tarea de descifrar de manera oficial el esquema que permita explotar el mayor potencial de Wesley, será el propio brasileño, acompañado por Dani Gómez o Cantero, los elegidos por el preparador tras la marcha de Roger al Elche. A Soldado, lesionado del isquiotibial de su pierna derecha, ni está ni se le espera.

Tras las pruebas realizadas durante la presente pretemporada, estos futbolistas apuntan a conformar el bloque de Mehdi Nafti para la campaña 22/23. En caso de que no lleguen a producirse las salidas de la totalidad de las estrellas levantinistas, el técnico franco-tunecino podría variar su esquema, celebrando lo que supondría contar con jugadores de gran nivel para soñar con el regreso a Primera División.

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