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Catalán y Ribó entierran el viejo intento del Levante de marcharse de Orriols

Catalán y Ribó entierran el viejo intento del Levante de marcharse de Orriols

El presidente granota firma el convenio para la segunda fase de las obras y avanza que la ciudad deportiva de Nazaret arrancará en primavera

J. CARLOS VALLDECABRES

VALENCIA.

Jueves, 17 de septiembre 2020, 00:18

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La dualidad de situaciones que se vive en la ciudad respecto al tema de los estadios experimentó ayer un agradable aroma azulgrana. La visita del alcalde, Joan Ribó, a un Ciutat de València patas arriba por las obras de remodelación sirvió para que los levantinistas sacaran pecho y se felicitaran por cómo les va las cosas de bien teniendo en cuenta lo crudo que lo tiene el vecino de Mestalla. En poco más de una hora dio tiempo suficiente para enterrar un convenio que recogía la intención de vender el solar de Orriols y trasladar el estadio a otro sitio; firmar un nuevo acuerdo para la segunda fase que se iniciará apenas unos meses después de que concluyan las obras actuales; para fotografiarse unos y otros en esa particular contrarreloj en la que se ha convertido el nacimiento de la cubierta, y para ilusionarse finalmente todos con la futura ciudad deportiva de Nazaret que se encuentra actualmente en fase de tramitación burocrática.

El Levante se quedará en Orriols. Nadie lo había puesto en duda pero un documento municipal firmado hace once años albergaba la posibilidad de que este solar acabara convirtiéndose en fincas. «Siete edificios», aseguró un Quico Catalán casi exultante, tras recordar que aquella maniobra permitió una vía de escape a una difícil situación financiera. En sus palabras, entre líneas, el dirigente deslizó un mensaje que enlaza con la actualidad que experimenta el Valencia. «No nos vamos de nuestra casa. El Levante nunca pretendió especular con su estadio. Era la mejor solución para dar garantías. Ahora queremos tener un estadio referente a nivel nacional y no sólo a nivel futbolístico».

El Levante insiste en que contra el Celta -a mitad de octubre- ya estará listo el escenario. En esta primera fase quedará finiquitado el anillo que dará la cubierta a todo el graderío, además de mejorar los sistemas de iluminación, señalización, televisión y seguridad. Hasta noviembre, de cualquier manera, no estará todo finalizado. Después será el turno de la segunda fase, que durará otros 20 meses.

La primera fase concluirá en su totalidad a finales de noviembre y la segunda parte de la remodelación tiene un plazo de 20 meses

A su lado, Ribó -acompañado por las concejalas Sandra Gómez, Pilar Bernabé y Lucía Beamud- no ahorraba parabienes para los dirigentes levantinistas resaltando la iniciativa de Nazaret. «Me ha sorprendido», comentaba en un primer término sobre el estadio, mientras que de la ciudad deportiva decía que «va a dinamizar el barrio de Nazaret».

Catalán, que espera empezar las obras de Nazaret en la primavera de 2021, argumentó su ideario: «Somos unos gestores que dentro del rigor pretendemos que tenemos que construir el mejor Levante posible. No lo veo un riesgo. Este club tiene que evolucionar y crecer. La ciudad deportiva es un proyecto bonito e importante para la ciudad. Este club es muy grande aunque sea el pequeño de la ciudad».

El Levante no descarta buscar un patrocinador que dé nombre al estadio (« algo que nos identifique a todos»). De los 60 millones de euros que se han obtenido en la financiación, 30 ya se han dispuesto para darle el impresionante lavado de imagen a un estadio que en la época de Ramón Victoria estaba casi en tierra de nadie y casi sin accesos.

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