Una fiesta por el consumo de cannabis reúne a 400 personas en Museros

Según han explicado portavoces de la organización, la empresa cuenta con todos los permisos. «Esta misma mañana han venido a comprobar la contaminación acústica desde las casas más cercanas», han comentado. La alcaldesa de Museros, Cristina Civera, sin embargo, ha asegurado no tener conocimiento de la fiesta y ha explicado que iba a avisar a la Policía Local para que diera traslado de la celebración a la Guardia Civil.

 

El evento se celebraba en una masía privada, de forma similar a como ocurriría si fuera una boda, tal como han explicado desde la organización. Sin embargo, no son muchas las bodas que se celebran en una «ubicación secreta de l'Horta Nord», como anunciaban en sus redes sociales, de ahí los autobuses que llevaban a los asistentes.

Además, las vallas que rodean la casa estaban cubiertas por una tela negra para evitar que se pudiera ver lo que hay en el interior, donde se organizaron conciertos en torno a una piscina y charlas centradas en el cannabis, como una del despacho de abogados Brotsanbert especializado en «asuntos cannábicos.» Además, se consumieron grandes cantidades de marihuana, incluidos porros de casi 25 centímetros, tal como la propia organización mostró en redes sociales.

«Ha venido gente de toda Europa, incluidas empresas que venden flores de cannabis. Es como si fuera incienso, luego ya el uso que tú les des... es como los cuchillos», explicaba de forma gráfica uno de los organizadores del evento. Además, preguntado por si el consumo de marihuana es ilegal o legal, decía que era «alegal». «No estoy muy enterado del tema, pero para consumo propio es legal... bueno, no legal tampoco, está en una zona gris...», decía el portavoz en respuesta a este diario. El consumo de marihuana en la vía pública está considerado infracción administrativa.