Posgrados: reinvención obligada, con la digitalización como gran reto

La pandemia global del Covid-19 ha venido para cambiarlo prácticamente todo y la educación es uno de los sectores que más lo está notando. Durante las primeras semanas de confinamiento todos los escalones del sector educativo han hecho verdaderos esfuerzos para ofrecer a los alumnos alternativas para continuar su formación de forma no presencial. Las herramientas digitales, los nuevos lenguajes y cuestiones como la realidad aumentada, el 'big data' o el 'blockchain' entran en juego para un futuro en el que grados, posgrados y especializaciones caminarán, según los expertos, hacia un futuro inmediato menos presencial y con más opciones para alumnos, profesores y centros formativos.

Con el curso 2019-2020 totalmente condicionado por los efectos de la crisis del Covid-19, el sector de la educación superior en España no ha perdido el tiempo de cara a preparar el siguiente curso, sin perder de vista el cierre parcial del actual. «Hemos tenido que dar la vuelta casi al completo a nuestro concepto educativo, adaptándonos a eso que llaman nueva normalidad, para ofrecer al alumno la posibilidad de continuar su formación especializada en septiembre de forma semipresencial y 'online', ya que creemos que son dos de las opciones que más se van a demandar en el futuro más inmediato», detallan desde un centro de estudios superiores de Valencia, desde donde detallan el enorme esfuerzo que para ellos ha supuesto adaptarse a esta nueva situación. No es solo, recuerdan, todo lo perdido durante las semanas de confinamiento y cómo estas han hecho daño, por ejemplo, en las prácticas formativas o en la bolsa de empleo del centro, sino que el nuevo guión impuesto por el Covid-19 ha hecho que todos los planes de estudio hayan tenido que replantearse para ofrecer con sesiones de clases no presenciales, con materiales didácticos mucho más abiertos e interactivos y con la aplicación de las nuevas tecnologías que ya estaban llamando a la puerta desde hace unos cursos. «Todo esto queríamos hacerlo en los próximos años y el Covid-19 nos ha obligado a reinventarnos en unos meses y de forma acelerada», añaden.

Adaptación

La digitalización es el gran reto de los estudios de posgrado, en un momento en el que, además, el perfil de los estudiantes que escoge este tipo de formación demanda a los centros educativos este tipo de oferta. Durante estas semanas de confinamiento, universidades, institutos, colegios, instituciones y centros formativos han apostado por ofrecer 'webminars', videollamadas grupales, tutorías y clases virtuales, dando un paso más en el crecimiento de la formación electrónica y digital, del 'elearning'.

La crisis sanitaria, en la mayoría de los casos no ha hecho más que reforzar la estrategia digital por la que el centro había comenzado a apostar, con herramientas tecnológicas de todo tipo y la creación de canales más fluidos de comunicación entre los profesores, muchos de ellos profesionales en activo que también han tenido que trabajar desde casa durante el Estado de Alarma, y el alumnado.

«Una de las cosas que más valoraba del posgrado que escogí era las versatilidad que ofrecía y el hecho de que podías organizarse tú de una forma cómoda. Ahora, con las nuevas herramientas que nos ha proporcionado el centro para seguir talleres y seminarios por videoconferencia y para poder realizar prácticas a nivel 'online' incluso me planteo hacer otro curso superior cuando acabe este, ya que podría compatibilizarlo con el resto de cosas que hago», detalla Mireia, alumna de un Máster of Business Administration (MBA) en una universidad privada valenciana.

La principal barrera para que los alumnos continúen apostando por los cursos de posgrado, avisan desde el sector, será la situación económica del alumnado y sus familias.

«En un entorno inestable, con expedientes de regulación de empleo (ERTE) en marcha, incertidumbre económica y difícil empleabilidad, muchos estudiantes querrán esperar a cursos siguientes a dar el paso y eso puede dar traste con algunos de los nuevos cursos que habíamos preparado para 2021», avisa Marcos, docente en un máster especializado en marketing 'online' y 'branding'. Sin embargo, el sector continúa viendo los posgrados como una cuestión de vital importancia para el empleo. Es por ello que escuelas de negocio y universidades continúan adaptando su oferta de posgrado a las necesidades del mundo de la empresa, hasta el punto de que la especialización es una de las pocas diferenciaciones que tienen los alumnos de cara a intentar entrar en un mercado de trabajo cada vez más volátil, concurrido, inestable y precario por culpa de la crisis generada por el Covid-19.

El incierto futuro de las prácticas formativas dentro de la empresa, uno de los grandes pluses de los posgrados y másteres, quedará resuelto en los próximos meses, cuando la evolución de la pandemia y sus efectos sean más claros. De ahí que, desde el sector, no preocupe que esto vaya a ser un handicap negativo para que los alumnos pospongan sus estudios superiores y de especialización.

Nuevos escenarios

En este nuevo escenario educativo en el que nos encontramos emerge fundamentalmente la figura del docente que, ahora más que nunca, deberá estar a la altura de los tiempos y de las exigencias de un doble tipo de formación: presencial y 'online'. Su destreza, capacidad de adaptación, versatilidad y habilidades formativas serán clave, no solo para aplicar los nuevos planes de estudio que se están adaptando, sino para sacar el máximo partido a las herramientas digitales de las que dispone cada centro y para diseñar experiencias de aprendizaje que sirvan para que el alumnado consiga sus objetivos.