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Rafael Aznar, expresidente de la Autoridad Portuaria de Valencia. IRENE MARSILLA
Anticorrupción pide el archivo
de la causa contra Rafael Aznar

Anticorrupción pide el archivo de la causa contra Rafael Aznar

La fiscalía solicita el sobreseimiento del caso por supuestas irregularidades en la gestión del Puerto de Valencia

A. RALLO

Miércoles, 13 de febrero 2019, 01:01

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La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado el archivo de la causa contra el expresidente del Puerto de Valencia Rafael Aznar por supuestas irregularidades en la gestión del recinto portuario. El fiscal, tras más de cinco años de exhaustiva instrucción, considera que no existen indicios suficientes para continuar con la causa penal.

La decisión del ministerio público aboca la causa al sobreseimiento al no existir otra acusación personada en las diligencias.

En el escrito presentado en el juzgado de Instrucción número 14 de Valencia propone, no obstante, que se derive el asunto al Tribunal de Cuentas por si los hechos, que a juicio del fiscal merecen reproche, pudieran generar algún tipo de procedimiento por alcance, es decir, una reclamación del dinero. Esta vía, según las fuentes consultadas, tendría escaso recorrido.

El ministerio público no aprecia indicios suficientes para continuar con la causa penal

La investigación al expresidente del Puerto se dividió en dos piezas. La primera incluía el cobro de sobresueldos por parte de Aznar y otros directivos de la Autoridad Portuaria de Valencia, a través de una empresa participada en su inmensa mayoría por fondos públicos. La Intervención General del Estado alertó de la grave irregularidad que suponía el cobro de dos remuneraciones procedentes de dinero público. La Fiscalía llegó a pedir cinco años de prisión por estos hechos, pero la Audiencia evitó el juicio al desmontar el relato acusatorio del juzgado porque no se habían tenido en cuenta los datos exculpatorios que aportaron los investigados.

Así, actualmente sólo quedaba abierta la otra pieza, la relacionada con la gestión de las instalaciones y que abarcaba cuestiones tan peliagudas como obras en el Puerto, el gasto de cuatro millones de euros en un yate para seguir las regatas de la Copa América o el perdón de un millón de euros a la empresa Valmor por el acceso alternative al recinto para la Fórmula 1.

Esa causa en torno a la gestión del Rafael Aznar abocada ahora al sobreseimiento motivó la comparecencia como testigos del actual presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Aurelio Martínez, y del director general, Francesc Sánchez, en noviembre del año pasado.

El mandatario fue interrogado acerca de varias cuestiones controvertidas de la anterior etapa. Por ejemplo, el acceso al recinto construido precisamente para la celebración del Gran Premio de Fórmula 1. En su comparecencia, Aurelio Martínez defendió la utilidad que se le da a esta infraestructura, cuyo coste fue asumido por la Autoridad Portuaria en lugar de por la empresa Valmor Sport S.A., adjudicataria de la prueba automovilística.

Otra de las cuestiones polémicas de la época en la que Rafael Aznar estaba al frente del Puerto de Valencia es la obra de demolición del tacón de un muelle destinado al atraque de buques Ro-Ro donde la carga y descarga se realiza por rodadura. El expresidente encargó esta obra a la empresa MSC, naviera de referencia de la institución, por 3,5 millones de euros que sorprendentemente adelantó la institución portuaria. Posteriormente con la liquidación final de las actuaciones quedaban 1,5 millones deuros que no se reclamaron a la empresa, según los investigadores.

Respecto a este asunto, Aurelio Martínez apenas pudo aportar información al asegurar que desconocía los pormenores.

El yate de la Fórmula 1

El juez también le preguntó por el yate comprado por Aznar en su día y que costó cerca de cuatro millones de euros. Recordó que la embarcación se encuentra a la venta pero que, lamentablemente, tras la celebración de tres subastas nadie había querido quedarse con ese lujoso buque. La Intervención del Estado, en un informe que dio inicio a la causa penal, alertó de que esos gastos no encajaban «con los criterios de austeridad que deben presidir la gestión del dinero público».

Tanto Martínez como Sánchez admitieron que no han conseguido desprenderse del buque y comunicaron al juez su pretensión de alquilarlo para excursiones. Así, el yate que acogió a destacadas personalidades para las regatas podría acabar como lujoso escenario de alguna despedida de soltero en alta mar. Una fórmula para obtener ingresos de la embarcación, que está en Gandia y conlleva unos costes de mantenimiento de 15.000 euros anuales, frente a los 400.000 euros iniciales.

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