Pesic: «Paco Raga me preguntó si estaba preparado para un proyecto a tres años y dije sí»

Svetislav Pesic afronta el partido de mañana frente a Valencia Basket sabedor de que las opciones del Bayern se reducen tras el 80-58 del partido de ida. Pero el técnico nunca olvidará el cariño con el que le recibió la Fonteta, cuatro años después de aquel mágico marzo de 2011 en la Euroliga.

-Se le vio muy emocionado por el reconocimiento de la Fonteta.

-Volver a Valencia fue especial porque a veces pienso en mi tiempo como entrenador allí y sólo me salen recuerdos positivos. El cariño de la afición me emocionó porque para un entrenador no es importante lo que pasa fuera del pabellón, sino lo que ocurre dentro.

-¿Qué recuerda de esa época?

-Han pasado cuatro años pero mis amigos del mundo del baloncesto me siguen recordando aquella etapa, me dicen 'qué ciudad más bonita' y les contesto que no lo se porque no tuve tiempo de conocerla. El juego que hicimos en aquellos meses aún lo recuerda mucha gente.

-Lo que nadie puede negar es que recuperaron la ilusión por el baloncesto en la ciudad tras un mal inicio de temporada.

-Disfruté mucho de mi etapa en Valencia porque estaba muy contento con los jugadores, entrenadores, la gente del club y con el ambiente del pabellón, que estaba lleno en todos los partidos. Jugamos un baloncesto muy atractivo que movilizó a los aficionados a venir a la Fonteta.

-¿Y cual fue el secreto de su conexión total con el público?

-Valencia se ha convertido con el paso de los años en una ciudad que ama el baloncesto, y que le gusta presenciar un alto nivel. La afición entiende de baloncesto y mi sensación es que respetaron mucho mi trabajo con el equipo.

-¿Se sintió más querido que en Girona o Barcelona?

-En Girona fui muy querido por los aficionados, en Barcelona es diferente porque allí no se habla sobre baloncesto sino sobre ganar títulos.

-¿Por qué no siguió siendo entrenador del Valencia Basket?

-Es muy simple de explicar. Mi ambición al venir a Valencia no era terminar aquella temporada sino hacer un proyecto a largo plazo. En mi cabeza siempre pensé porqué el club no hacía un paso adelante para competir por ganar la ACB con el Real Madrid y Barcelona.

-¿Y qué oferta le hizo el club?

-Desde el momento que llegué comenté que mi objetivo era crear ese proyecto y durante esos meses comenzamos a hacerlo con los resultados en Euroliga. Hablamos en marzo y Paco Raga me preguntó si estaba preparado para un proyecto a tres años y dije que sí.

-Pero no se firmó nunca eso.

-Fui a presenciar la Final Four de Barcelona y mi agente me llamó para decirme que había tenido una reunión con el Valencia Basket y que no tenía esos tres años sino una oferta de un año. Contesté que no soy entrenador de un año.

-¿Ha reflexionado sobre los motivos de ese cambio de opinión? La temporada en ACB no acabó bien y se habló del exceso de presión.

-En este tiempo he pensado donde estuvo el problema para ese cambio, si fue financiero o por mi exigencia en el día a día. Si quieres ganar la ACB necesitas a un técnico que piense todo el día en baloncesto.

-¿Era usted ese técnico?

-En ese momento era el entrenador que necesitaba el Valencia Basket porque no podía competir en presupuesto para fichar a los mejores jugadores. Todo el mundo sabe que soy un entrenador que saca partido a los jugadores y les hace mejores.

-Un modelo parecido al de Spahija y Perasovic, que conquistaron cada uno una Eurocup.

-Ambos son entrenadores que han dado mucho para el club aunque yo tengo otro estilo. Al final lo importante es conseguir los resultados, vine a Valencia con mucha ilusión.

-¿Cómo fue su relación con Juan Roig mientras estuvo en Valencia?

-Con el señor Juan Roig tenía muy buena relación y cariño. Me preguntaba sobre como estaba en Valencia y me decía que se alegraba de que estuviera entrenando aquí. Siempre me ayudó pero los temas de contrato los hablaba con Raga y Solà.