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Marcos Sánchez
Valencia
Miércoles, 16 de abril 2025, 18:33
LLa Federación de Atletismo de la Comunitat Valenciana (FACV) ha destinado cerca de 10.500 euros, recaudados con la venta de entradas del Gran Premio Internacional de Atletismo Valencia 2025, celebrado el pasado 7 de febrero, a tres centros educativos de l'Horta Sud gravemente afectados por la Dana del 29 de octubre. El importe se ha distribuido entre el Colegio La Inmaculada de Paiporta y las escuelas infantiles Ninos de Alfafar y Picanya.
La presidenta de la FACV, María José Orugo, visitó personalmente los centros para conocer de primera mano su estado y hacer entrega del cheque, por valor de 5.247,35 euros. En el caso del Colegio La Inmaculada, que continúa en proceso de reconstrucción, el jefe de estudios explicó que la ayuda se invertirá en la recuperación del gimnasio, actualmente inutilizable, lo que obliga a los 334 alumnos, de entre 3 y 16 años, a realizar las clases de Educación Física en el patio o incluso en la calle, al estar también inutilizado el polideportivo municipal.
En cuanto a las escuelas Ninos, ambas se encuentran aún cerradas, medio año después del desastre. La de Alfafar quedó completamente devastada, mientras que la de Picanya también sufrió importantes daños. Los niños de la escuela infantil de Picanya han sido reubicados temporalmente en la Biblioteca Municipal, mientras que los de Alfafar están asistiendo a clase en la sede de la empresa en Albal.
María Jesús, una de las responsables de Ninos, expresó que «este tipo de ayudas son importantísimas para poder acabar la reconstrucción de los centros educativos, tan importantes para las familias de todos estos niños afectados», visiblemente emocionada al recordar cómo no pudieron ni entrar al edificio de Picanya por la cantidad de cañas acumuladas y la completa destrucción del interior, sin puertas ni ventanas.
«Nos tenemos que salvar nosotros mismos. Esta tragedia, desgraciadamente, ha servido para humanizarnos y recordarnos la importancia de tener unos valores. En la FACV, en cuanto vimos la dimensión de la catástrofe, no dudamos en dar el paso de cobrar por primera vez por las entradas del Gran Premio y destinar la recaudación íntegra para ayudar a los centros educativos. Anteriormente, gracias al Maratón de Valencia Trinidad Alfonso Zurich, la Fundación Trinidad Alfonso y la Sociedad Deportiva Correcaminos, ya pudimos ayudar y lograr que volvieran a retomar su actividad los clubes de atletismo afectados por la Dana, así que era lógico destinar la donación a otras necesidades.»
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