«Hemos vendido 50 tests de golpe»

Francisco Albanell, vocal del Colegio Oficial de Farmacéuticos (MICOF) explica que las causas de esta sobredemanda se deben a «varios factores». Por un lado, las celebraciones navideñas están a la vuelta de la esquina y la gente se está haciendo pruebas por precaución. En especial, aquellos que tienen pensado reunirse con familiares mayores. Por otro lado, la temporada de gripe también está afectando a la población. «Los clientes vienen con síntomas como la tos y mucosidad y quiere saber si tienen gripe o coronavirus», explica Albanell.

El problema es que hay pocas unidades para la gran demanda que existe actualmente. Durante los meses de verano la oferta de tests de antígenos era enorme. «Había tests a precios muy baratos» ,afirma. Sin embargo, desde noviembre la situación se ha revertido y la falta de stock en las farmacias está causando incertidumbre. «Esta tarde no nos quedarán tests y no sabemos cuando recibiremos más», revelaron en una farmacia situada en el barrio de Ayora.

Además, no existe una regulación comercial que limite a los compradores a adquirir un número determinado de pruebas rápidas. «Esta mañana una señora se ha llevado cincuenta», desveló la farmacéutica.

La falta de oferta se traduce en una subida en los precios de los tests. Tal y como explica el vocal del Colegio de Farmacéuticos, la fuerte demanda presiona a distribuidores y cooperativas que están agotando las existencias de pruebas de antígenos. Esto favorece la especulación de precios por parte de vendedores paralelos, que importan tests de otros lugares y aprovechan la situación para subir su coste. Se calcula que los precios han aumentado alrededor de un 10%. «Lo que valía de cinco a ocho euros ahora cuesta diez o doce», señala Albanell. No obstante, los intermediarios sufren la encrucijada de tener que recurrir a otros mercados para abastecer a los consumidores que demandan autotests.

Para favorecer la situación se recomienda mantener la calma y hacer un uso adecuado de los tests. Depositar toda nuestra confianza en ellos puede ser un error ya que a pesar de su alta efectividad hay que tener en cuenta que las pruebas de antígenos sirven para ocasiones determinadas. «De poco sirve un test de antígenos si el afectado no tiene carga viral», afirma Albanell. Es decir, aunque hayamos estado en contacto con una persona positiva en coronavirus hacerse la prueba al día siguiente puede conllevar a obtener un resultado poco fiable, ya que nuestra carga viral será muy baja.

A su vez, el portavoz del Colegio de Farmacéuticos insta a hacerse la prueba a los cuatro o cinco días de haber tenido contacto con un positivo o, si se presentan síntomas evidentes. «La población tiene que tener muy en cuenta cuándo debe usar un test de estas características», señala Albanell.

Cabe destacar que hay muchos tests provenientes de otros países que se encuentran paralizados en la aduanas debido a problemas administrativos. Como consecuencia, la oferta de tests es muy reducida. Desbloquear esta situación ayudaría a cubrir la falta de stock y solventar la sobredemanda. «Agilizar estos problemas supondría tener los tests disponibles en farmacias de dos a tres días», sentenció.