Vecinos de Benimaclet recogen más de 2.000 firmas para exigir que se les escuche en el nuevo plan urbanístico
La asociación reclama al Ayuntamiento una auténtica «participación ciudadana» para debatir el proyecto
Redacción
Valencia
Miércoles, 3 de mayo 2023
Los vecinos de Benimaclet quieren participar en la configuración de su barrio. Pero de verdad. Así lo señala la Asociación Vecinal de Benimaclet que ha destacado en un comunicado que «no renunciamos al derecho a participar en el diseño urbanístico que marcará el futuro de nuestro barrio».
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Esta asociación ha promovido una campaña de recogida de firmas para que se haga un verdadero proceso participativo en el diseño del nuevo PAI de Benimaclet. Hasta el momento llevan más de 2.000 en poco más de dos semanas. Estas se han ido recogiendo en los siete puntos del barrio que se han habilitado en respaldo de la iniciativa vecinal.
Y es que los vecinos están un poco mosca con el Ayuntamiento. Ya hace un par de semanas manifestaron su malestar por un acto pensado para explicar a los vecinos el PAI de Benimaclet. En el encuentro se encontraba el propio alcalde de la ciudad, Joan Ribó, la vicealcaldesa, Sandra Gómez. Este hecho no fue óbice para que asistentes se quejaran de que el sitio en el que se desarrollaba la reunión no reunía las condiciones adecuadas porque no cabían todos y expresaron sus dudas sobre los verdaderos deseos de escucharles de las autoridades locales.
La tensión llegó a tal extremo que desde el equipo de la vicealcaldesa se vieron obligados a sacar un comunicado donde decía que se escucharían todas las voces, pero también que ninguna opinión valía más que otra, lo que se puede interpretar como una carga de profundidad contra la Asociación de Vecinos de Benimaclet.
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En el comunicado que hicieron público ayer, los vecinos pusieron en duda la voluntad real del equipo de gobierno de escucharles de verdad. «Denunciamos la manipulación del lema 'proceso participativo' que algunos partidos políticos y algunas personas con responsabilidad institucional hacen de él». Así de claros.
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En este sentido, Francisco Guardeño, portavoz de la Asociación Vecinal de Benimaclet, ha señalado que «si hablan de proceso participativo queremos que sea de verdad». Guardeño ha argumentado que desde hace legislaturas los partidos llevan en su programa la «participación». Pero del dicho al hecho hay un buen trecho, como ha destacado este dirigente vecinal.
«El proceso participativo tiene que ser real y no como el paripé que organizaron el otro día. Aquello no eran consultas. Nos encontramos con un proyecto cerrado. Eso no es participación», ha recalcado el portavoz de la asociación de Benimaclet. «El pescado estaba vendido. Esto no es un proceso abierto», ha remarcado.
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Guardeño ha señalado que lo único que pretenden es que se les escuche y se debatan sus propuestas. «Detrás de ellas hay horas de trabajo y profesionalidad», afirma y explica que son planteamientos «debatibles. Al final la decisión la tienen que tomar ellos». Pero el problema, según el portavoz, «es que se nos escuche de verdad». «No estamos aquí para debatir la altura de un árbol. Eso es una minucia, una chorrada», ha recalcado.
Francisco Guardeño ha señalado que la recogida de firmas tiene más que nada un valor simbólico. «Cuando acabemos, que será en unas dos semanas, las enviaremos al Ayuntamiento. Ya sabemos que no tienen valor pero sí que demuestran que los vecinos queremos un proceso participativo auténtico», ha expresado.
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«Si es un proceso participativo, vamos a creernoslo. Y, en caso contrario, que decidan lo que crean conveniente. Pero a nosotros nos interesa el futuro urbanístico del barrio y tenemos derecho a debatirlo», ha añadido el portavoz de los vecinos. «Una cosa es Decidim y otra bien distinta una cuestión de tanto peso como esta», ha recalcado.
«Hablar de participación mola. Como mola hacerse la foto con los vecinos cada cuatro años. Otra cosa es ponerlo en práctica», ha matizado. «La concejala no escucha, lo que ha creado un hondo malestar», ha afirmado Guardeño.
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