Sanidad reforzará el SAMU con el triple de enfermeros que de médicos pese a las denuncias por la falta de facultativos
El juicio contra la conselleria por permitir que presten servicio unidades sin galenos será el 3 de mayo y los profesionales critican el retraso de los cursos de formación
El reparto de las primeras 5.040 nuevas plazas estructurales que la Conselleria de Sanidad pondrá en marcha en la red pública a partir del ... 1 de mayo (se reserva otro millar más para después del verano) también ha generado malestar entre los médicos del SAMU (Servicio de Atención Médica Urgente), que no acaban de comprender por qué se prevén casi el triple de refuerzos de enfermeros que de facultativos en estas unidades en las que, precisamente, lo que faltan son galenos y así lo han denunciado sindicatos como CESM-CV y CSIF o la comisión de médicos SAMU del colegio oficial de facultativos de Valencia. En concreto, el departamento autonómico ha previsto la creación de 60 nuevas plazas de enfermero del SAMU frente a sólo 24 de facultativos.
«Llama la atención que unidades de emergencias para pacientes críticos, que su dotación debe ser un médico, un enfermero y un técnico, no cuenten con un crecimiento idéntico en cada categoría profesional y que, en el caso de los enfermeros, casi triplique al de médicos», señala al respecto Víctor Pedrera, secretario general del Sindicato Médico de la Comunitat (CESM-CV). «Y también nos llama la atención que la Administración ponga excusas cuando salen ambulancias sin médico porque no hay facultativos... Puesto que, precisamente, para solucionar el problema hay que crear plazas estructurales de médico», espeta este portavoz.
Al respecto, Pedrera intuye la explicación que ha motivado esta decisión. «Tenemos la creencia y el convencimiento de que pretenden sustituir a los médicos por enfermeros en las unidades del SAMU, pese a que se tienen que establecer diagnósticos y administrar tratamientos en situaciones vitales, y todo ello tiene que estar coordinado por un médico». En su opinión, es la forma que tiene Sanidad de potenciar el llamado Servicio Vital Enfermero (SVE), unidades que «jamás se deben utilizar para atender situaciones vitales en las que cuando la unidad acuda a donde está el paciente no sepa lo que se va a encontrar». Pedrera valora el papel que estas SVE puedan tener en una actividad programada, «en servicios en los que sepan lo que se van a encontrar y sepan que están capacitados para ello», «pero a una urgencia debe acudir un médico», subraya.
Sin embargo, la falta de facultativos provoca que ocasionalmente tengan que prestar servicio unidades del SAMU sin médico, algo que como avanzó en exclusiva LAS PROVINCIAS ha llevado a la comisión de médicos SAMU del colegio oficial de facultativos de Valencia a presentar una demanda en el juzgado contra la Conselleria de Sanidad. La vista del juicio se ha fijado para el próximo 3 de mayo, momento en el que la Administración deberá aportar sus justificaciones de viva voz.
Una familia reclama 200.000 euros por la muerte del padre atendido por una ambulancia sin médico
Los servicios jurídicos contratados por una mujer y sus dos hijos han iniciado un expediente de responsabilidad patrimonial para reclamar a la Conselleria de Sanidad una indemnización de 200.000 euros por el fallecimiento del padre tras ser atendido durante una urgencia por una unidad SVB (servicio vital básico), ambulancias que no están dotadas de personal facultativo.
Los hechos se remontan a finales de agosto de 2020 en un municipio de la comarca de la Safor. Tras una caída, el hombre sangraba abundantemente por oídos y nariz, por lo que fue atendido por un SVB. Según la familia, y tras algunas supuestas irregularidades (como que no le inmovilizaron la cabeza o que tuviera que llegar hasta la ambulancia por su propio pie), fue trasladado al hospital Francesc de Borja de Gandia, centro que carece de neurocirugía. Allí, siempre según la denuncia, no se informó a los médicos sobre la gran cantidad de sangre que había perdido y al tener fiebre fue remitido a la unidad de sospechosos Covid donde, siempre según la denuncia, se contagió. Finalmente, y tras un TAC que confirmó la fractura de cráneo, se solicitó un SAMU y fue trasladado al Clínico, donde fue intervenido de urgencia. Dos semanas después fallecía sin que la familia pudiera acompañarle ni despedirse al estar contagiado de coronavirus.
En esta línea, el sindicato CSIF también denuncia la situación y desde la formación ejemplificaron que unidades del SAMU como las de Manises, el Hospital General de Valencia y La Fe Boulevard «salieron sin médico» el pasado domingo 3 de abril. «Este hecho también se produjo, durante dos horas, en Sueca. La situación se extendió el lunes día 4, por ejemplo, a Alfahuir; y el martes día 5, a Hospital General, ambas en Valencia», lamentaron. CSIF afea la conselleria «la falta de soluciones» y advierte de que puede reproducirse esa carencia de facultativos en jornadas clave como las inminentes de Semana Santa, entre el 14 y el 19 de abril.
Y para rematar la situación se suma el retraso en la convocatoria de los cursos de formación y acreditación necesarios para que los facultativos pueden ejercer como médicos del SAMU, como también avanzó este diario y denuncian CESM-CV y la citada comisión de facultativos. En concreto, entre 2020 y este año únicamente se ha convocado un curso para obtener el título que acredita a estos especialistas con la capacitación para formar parte del transporte sanitario medicalizado; mientras que en 2019 y ejercicios precedentes se convocaba entre uno y dos al año. Frente a ello «desde enero ya han hecho dos cursos para enfermeros», destacan los especialistas. Desde Sanidad indican que en 2020 no se convocaron por la pandemia, que el pasado año sí se llevaron a cabo, aunque de forma telemática los contenidos teóricos y con grupos reducidos los prácticos, y que este año se volverán a realizar, aunque aún no se ha concretado la fecha.
Desde el Sindicato Médico señalan que este retraso en los cursos de formación también afecta a la cantidad de facultativos disponibles. «En Alicante nos consta que hay médicos de familia que están interesados en trabajar en el SAMU y no se pueden apuntar porque no tienen el curso de acreditación», indican.
Este curso permite contar con el Diploma de Transporte Sanitario Medicalizado (DTSM), documento que acredita a los médicos para actuar en las ambulancias del SAMU. En los primeros años en los que se diseñó constaba de 150 horas teóricas y 48 horas prácticas, «duración que esta conselleria decidió ir reduciendo progresivamente hasta las 54 horas teóricas y 72 horas prácticas, quizá debido a que las horas teóricas son las únicas que la Administración retribuye a los docentes».
En el sindicato, además, tienen constancia de que un gran número de médicos residentes (MIR) que acaban la especialidad el próximo mes de mayo «desean trabajar en las ambulancias del SAMU, pero no podrán acceder a la bolsa de trabajo para poder ser contratados al no haber podido optar a la titulación requerida».
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