Sanidad adelanta a mitad de julio el traslado de pacientes del hospital Moliner al Militar de Mislata

Por su parte, el hospital Padre Jofré será el destino de los enfermos que estaban en lista de espera para ingresar en el Moliner, y también se va concretando la fecha en la que llegarán. Será a partir del 15 de junio cuando el centro de Valencia acoja a los primeros pacientes en esas 30 nuevas camas que se han habilitado, según ha informado la dirección a los empleados y ha podido saber este periódico. Y junto con estos nuevos pacientes también se incorporará parte del personal sanitario derivado de Porta Coeli, que atenderán a estos enfermos crónicos y de larga estancia.

Pero mientras Sanidad ha tenido que cambiar sus planes al detectar problemas graves en la estructura del Moliner, lo que ha obligado a su cierre, este traslado de pacientes a Mislata ha conllevado que los enfermos tanto de psiquiatría como los crónicos del departamento de Manises, que iban a ocupar ese reformado espacio en Mislata, tengan que ser derivados a otros hospitales u otras zonas más antiguas de este complejo sanitario, lo que está motivando críticas de profesionales y familiares afectados.

A este respecto, el conseller ha indicado que la planificación sanitaria «es dinámica y tiene que estar perfectamente habilitada para las actuaciones sobrevenidas», y además, para explicar esta situación, aunque sin ser concreto, ha añadido: «Cuando tienes que afrontar una reforma de un hospital y tienes requisitos de los pacientes de media estancia, paliativos y de daño cerebral lo que intentas es buscar y habilitar una serie de lugares como el Militar o el Padre Jofré, intentas readecuar los flujos de pacientes crónicos con la reorganización del mapa sanitario». No obstante, ha recordado que con los 724 millones de euros dedicados a salud mental «estarán perfectamente satisfechas las necesidades» de los pacientes, aunque ello conlleve que no puedan disfrutar del centro que desde hace meses se les dijo, al estar ahora dedicado a los del Moliner.

Entre finales de marzo y principios de abril fue cuando Sanidad tomó la decisión de cerrar por completo el centro de Serra para su reforma integral, tras los informes técnicos. «Hemos mantenido 12 reuniones con los trabajadores y los equipos directivos y de ingenieros. Estamos plasmando una hoja de ruta que es la que va a suceder. Todo está perfectamente planificado, estudiado y avalado con los equipos técnicos, tanto el personal directivo médico como los ingenieros y los propios trabajadores», ha explicado.

No obstante, las críticas sobre este proceso de cierre están llegando desde varios frentes, como son los trabajadores del centro, los familiares de los pacientes e incluso desde otros hospitales, que están viendo cómo les llegan más pacientes al no admitir ninguno más el Moliner. Al respecto, este martes los sindicatos han convocado una manifestación en Porta Coeli para protestar por la gestión de Sanidad en este proceso de traslado de enfermos, para "exigir una reubicación justa y rápida de pacientes y trabajadores", señalan.

Y junto al argumento de que todo «está perfectamente planificado», el conseller también ha querido recordar que él, en su etapa de director de Gestión Clínica Medica en el Hospital La Fe, fue parte activa de «un traslado mucho más importante, que fue el de La Fe vieja a La Fe nueva», que sucedió entre 2010 y 2011. «Así que de esto algo sabemos», ha dicho, para justificar el proceso de traslado del Moliner ahora.

En el Militar de Mislata, que va a ser un complejo sanitario tras las distintas fases de reformas previstas, se han invertido 57 millones de euros en la rehabilitación de pabellones antiguos y construcción de otros nuevos. «El hospital Militar ya es una realidad, en julio ya estará habilitado y la segunda fase pensamos que estará antes de que acabe el año. Intentaremos rehabilitar algún otro edificio de allí, como el centro de especialidades», indica el responsable de la sanidad valenciana. También instalarán un Punto de Atención Continuada en unos terrenos cedidos por las Fuerzas Armadas, equipado con un quirófano de cirugía mayor ambulatoria y radiología digital.

Por su parte, a poca distancia del Militar, la localidad de Mislata contará con un nuevo centro de salud, el segundo del municipio. Tendrá 12 consultas de medicina familiar, 12 de enfermería, 3 de pediatría, un área maternal, de rehabilitación, de ginecología, extracciones y una adaptación a las nuevas tecnologías. «Tendremos Inteligencia Artificial tanto en la radiología, habrá retinografía conectada digitalmente a los servicios de oftalmología, así como la telederma y las mamografías digitales», ha anunciado el conseller.

«Se trata de que vierta el conocimiento de los especialistas de familia, dotándoles de todas las infraestructuras tecnológicas necesarias para que puedan hacer un diagnóstico rápido, certero y eficaz. Es la agilización de los métodos diagnósticos y repercutirá en la disminución de derivaciones innecesarias a los hospitales», ha añadido Gómez. Este ambulatorio tendrá un coste de 4,2 millones de euros.

El alcalde Mislata, Carlos Fernández Bielsa, ha indicado que este nuevo centro de salud, que irá ubicado en la actual parcela en la que está el colegio Maestro Serrano, que será derribado, «viene a cumplir una reivindicación histórica del municipio, vamos a tener un nuevo concentro de salud que mejorará la calidad asistencial sanitaria, dejaremos de usar un centro auxiliar y tendremos muchos más médicos», establece.