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Puig junto a Mata y Barceló en Les Corts. EFE
El Gobierno critica a Puig por utilizar la misma estrategia que Ayuso con las vacunas

El Gobierno critica a Puig por utilizar la misma estrategia que Ayuso con las vacunas

El Ejecutivo califica de «desleal» la cita con Janssen, el jefe del Consell rectifica y Sánchez ve tocada su campaña contra la líder del PP madrileño

H. E./JC. F. M.

Valencia

Miércoles, 7 de abril 2021

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El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se está «ayusizando», comentó ayer un alto cargo del PSOE después de que el jefe del Consell haya optado por su estrategia particular en un plan nacional de vacunación que bordea el desastre. En el Gobierno central existe «un profundo malestar», según confirman fuentes del propio ejecutivo, con la postura de Ximo Puig, que ha organizado una agenda propia de reuniones con las farmacéuticas que producen las dosis cuando en realidad no tiene competencias para comprar. La postura del líder valenciano se aproxima a la de Díaz Ayuso en Madrid. Incluso en el Ejecutivo central fueron más allá y calificaron la postura de Puig de «desleal». Puig se reunía con Janssen en el mismo momento que Sánchez anunciaba su plan de vacunación.

El 27 de marzo, el presidente valenciano se reunió con representantes de Astrazeneca, y la cita no tuvo más trascendencia que la de una nota de prensa. El martes lo hizo con Janssen, pero aquí el escenario cambió porque la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha reconocido contactos con los rusos de la Sputnik V para adquirir vacunas como crítica al Gobierno de Sánchez por su plan de inmunización.

Los grupos de la oposición en la Asamblea de Madrid y el Gobierno central habían iniciado una ofensiva contra la presidenta madrileña al considerar que va por libre en la toma de decisiones. Una estrategia bajo el dintel de la campaña electoral y que pretendía dejar a Díaz Ayuso como una desleal de cara al resto de los españoles. El gesto de Puig de reunirse con Janssen ha dinamitado esa estrategia, especialmente después de que la nota de prensa sobre la reunión con la farmacéutica apuntara que a la Comunitat llegarían dos millones de dosis en los próximos meses sin mencionar que la cantidad formaba parte ya del criterio poblacional pactado con el Gobierno. En el comunicado de la Generalitat se habla de «anuncio» y dio la sensación de que Puig había sido el negociador con la farmacéutica para que lleguen las monodosis a la Comunitat a partir de las próximas semanas. A pesar de ser de partidos distintos, Puig y Ayuso se situaban en la misma onda en su gestión para atajar la pandemia.

El Gobierno, como se puede comprobar en la información que actualiza cada día el Ministerio de Sanidad, ha comprado 17,5 millones de dosis de Janssen, por lo que por un puro reparto poblacional a la Comunitat le corresponden cerca de 1,7 millones. Esa relación por población en ningún momento figuró en la nota de prensa de la Generalitat y ayer Puig tuvo que matizar sus palabras del martes tras la reunión con Janssen. El presidente de la Generalitat hizo una ronda por varios medios de comunicación para aclarar que en ningún momento había negociado con Janssen la adquisición de vacunas y que los dos millones de dosis anunciadas se ceñían al acuerdo de compra de la Unión Europea, la distribución en España y el posterior reparto a las comunidades autónomas. «No estamos negociando con Janssen la compra de vacunas sino solicitando la máxima información posible», señaló Puig.

Desde el Gobierno ya se había puesto el foco sobre la posición de la Generalitat después de que el Consell del Botánico fuera el primero en poner sobra la mesa a nivel nacional la posibilidad de incorporar al catálogo de vacunas la rusa Sputnik, sobre la que todavía no se ha pronunciado la Agencia Europea del Medicamento. Una petición imposible de cumplir cuando no tiene la autorización desde Bruselas. El hecho de que la Comunitat tomara una posición no consensuada generó cierto recelo, más ahora que Díaz Ayuso ha dado el paso para pulsar la posibilidad de comprar dosis por su cuenta.

Puig además ha tratado de abanderar el movimiento para que se liberen las patentes de las vacunas. Una petición que se ha topado con el firme rechazo de la Comisión Europea.

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