Playas en estado de emergencia

Una falta de regeneración que en el caso del Perelló ya se encadena desde hace años. Ni el devastador temporal Gloria sirvió para que Costas decidiera aportar arena a una playa que se encuentra bajo mínimos tras años de pérdidas de sedimentos.

«No recuerdo cuándo fue la última vez que se hizo acopio de arena, pero hace años- Ahora ya no esperamos nada», comenta indignado el alcalde del Perelló, Juan Botella. Y es que en la última reunión mantenida con Costas ya se avanzó que «como pronto« se actuaría en verano de 2022 con un proyecto que contempla avanzar la línea de costa del litoral de Sueca en 22 metros con una inversión de nueve millones de euros.

Una solución que tampoco convence a los municipios afectados que consideran que la aportación de arena sólo es un parche si no viene acompañada de una actuación, a través de arrecifes, que frenen la erosión. Una solución que hasta el momento ha sido descartada por Costas pese a las múltiples reivindicaciones.

La falta de arena en la playa del Perelló, que apenas cuenta con varios metros de año supone que cada vez vaya menos gente a disfrutar de las jornadas veraniegas y por tanto un perjuicio económico para la entidad local menor.

Otro de los puntos del litoral valenciano en peligro es Les Marines de Dénia, en concreto, la zona de Blay Beach. Ya no es sólo que la playa no tenga arena, sino que los estragos que el oleaje hizo en los muros de primera línea en los últimos temporales siguen igual, con márgenes derribados y sus piedras ya sobre el mar.

En este sentido, el pleno de Dénia aprobará la solicitud a Costas de aportes de arena en las playas de Les Deveses, Blay Beach y Marineta Cassiana. El Ayuntamiento ya lo pidió en febrero y desde el servicio provincial les dijeron que no tenían y que debería formularse a través de una petición de la Corporación en sesión plenaria.

El Ministerio para la Transición Ecológica tiene pendientes un par de proyectos de recuperación del litoral de Dénia. El más avanzado es el correspondiente a la playa de Les Deveses, presupuestado en más de 14 millones. Pero no avanza, lleva tiempo pendiente de la declaración de impacto ambiental de la extracción de arena en Cullera.

En la Safor los ánimos están más que caldeados en varios Ayuntamientos. En Tavernes, por ejemplo, exigen una aportación «urgente» de arena de, al menos unos 30.000 metros cúbicos, dijo el edil de Urbanismo, Josep Llàcer, «para hacer frente a la temporada». La falta de áridos hace que las olas rompan en los chalés de la playa de La Goleta y en el tramo central de la costa vallera se hayan perdido varios metros de playa.

En este tramo sólo hay un par de metros de arena entre algunas casas y el mar. Esta situación está afectando ya a la economía local, agregó. Dos chiringuitos han renunciado a la concesión este verano en la playa de La Goleta. «El año pasado ya sólo montó uno y tuvo que cerrar el 15 agosto porque se lo llevaba el agua», relató el edil de Compromís. 

En Sagunto, Costas sí está actuando, en este caso, para reducir el escalón de grava que afecta a zonas como el Almardà. Sin embargo, redujo considerablemente la inversión par solucionar este problema pasando de 200.000 euros previstos a los 36.000 reales.

En Massamagrell las críticas se deben a la limpieza de su playa que se tiene que hacer de forma manual debido a que Costas no autoriza este año estos trabajos con máquinas como se hace habitualmente en el litoral. Esto provoca que el coste extra tenga que asumirlo el Ayuntamiento.