Un julio atípico deja registros de lluvias inéditos en la Comunitat

Sin embargo, y como señala José Ángel Núñez desde Aemet, «ha pesado más el calor de la primera mitad que el fresco del final» a la hora de que la temperatura media esté por encima de la habitual. Y es que el mes se puede dividir en una primera parte continuidad de un mes de junio que fue de récord y una segunda mitad más fresca, con temperaturas también muy anómalas, pero por lo frescas, ya que las temperaturas medias de los días 24 y 25 no eran tan bajas en la Comunitat Valenciana desde el año 1981.

La primera parte, sin embargo, también estuvo marcada por una dana inusualmente fuerte para tratarse de este mes. Posteriormente, llegaron varias semanas donde las temperaturas mínimas apenas bajaron de los 20 grados y se superaron los 40 en algunos puntos mientras que la última semana se está viendo definida por las temperaturas bastante más agradables y algún episodio de lluvia que causó incidentes menores como cortes de carreteras y caminos en puntos como Sagunto.

El meteorólogo Jovi Esteve explica que, a falta de realizar el análisis más exhaustivo del mes, ha habido al menos tres situaciones de lluvias generales que han afectado a gran parte de la Comunitat, lo cual es un poco atípico: «Sí que es probable que en el mes de julio pueda haber una situación de tormentas en el interior de Castellón, interior de Alicante o de Valencia, pero que sean así más generales y tres veces, es decir, que hayamos tenido tres vaguadas que hayan afectado o que se hayan realmente descolgado en la Comunitat me extraña mucho. Porque no son situaciones típicas de este mes».

Núñez, desde Aemet, coincide en que otros años ha habido tormentas en el mes de julio pero no con la frecuencia de esta ocasión (días 9, 12 y 24) y con la extensión que llegaron a tener en determinadas ciudades, por lo que lo calificó de un mes extremadamente húmedo. Paradójicamente, y pese a que el mes será más cálido que la media de los anteriores julios, Núñez remarcó que el pasado día 24 se registraron récords de precipitaciones en Sagunto y cifras también que estarán muy cerca de las máximas en puntos como Castellón de la Plana y Catí: «Hay que tener en cuenta que julio es el mes más seco en la Comunitat Valenciana. Es muy raro lluvias de estas características en julio, que son más típicas de final de agosto o septiembre».

En el caso de la capital del Camp de Morvedre, por ejemplo, el día 24 se registraron 40,4 litros, de los cuales 32,8 cayeron una hora y se convirtió en la tormenta más intensa del mes en esta ciudad. El día 9 se registraron 54,2 litros y el 12 otros 43,6. Se trata, por lo tanto, del mes de julio más lluvioso desde que se tienen datos (1949). Esa cifra, por ejemplo, contrasta con los 16,5 litros que apenas han caído en la ciudad de Valencia.

Después, los expertos han destacado esta continuidad de noches tropicales e incluso ecuatoriales que hicieron que la parte central del mes fuera bastante incómoda para poder conciliar el sueño. Basta con decir que el número de noches tropicales (mínima superior o igual a 20 ºC) en el observatorio de Valencia casi se han cuadruplicado en los últimos tres cuartos de siglo.

Pero también lo han hecho el número de noches especialmente adversas, que podríamos denominar tórridas o ecuatoriales, de forma que, por ejemplo, antes de los años 80 apenas se daban estas noches con temperaturas mínimas tan altas, y a partir de 1980 estas noches tan adversas han ido creciendo de forma que en la década de los diez de este siglo hubo 128 noches con mínima superior a 24 grados en Valencia y 40 con una mínima superior a 25 grados, a un promedio de cuatro noches al año.